La pandemia alejó a la gente del dentista, al pensar que visitarlo aumentaría el riesgo de contraer covid. Con ello, su salud bucal se descuidó y hoy en día mucha gente ha visto agudizar problemas como caries, gingivitis y fracturas dentales.
Las patologías bucales son las enfermedades más comunes y representan también un problema de salud pública, dada su alta prevalencia como su impacto económico.
- Te recomendamos Salud bucal, una prioridad en pandemia: Colegio de dentistas Ciencia y Salud
Desde marzo de 2020, los odontólogos empezaron a observar la reducción de sus consultas por el terror que generó el virus.
A la fecha, estos especialistas no han logrado recuperar el número de pacientes previo a la crisis sanitaria, y la falta de atención oportuna puede generar serios problemas tanto a niños como a adultos.
Y es que una carie asociada a un proceso infeccioso puede llegar a poner en juego la vida, de no ser atendida en tiempo y forma.
El coronavirus también está creando problemas con nuestros dientes porque el estrés lleva a muchas personas a apretar y romper sus piezas. Liliana Luna Lambarria, presidenta del Colegio de Cirujanos Dentistas en la zona sur de Tamaulipas, dijo que para brindar servicio con seguridad sanitaria siempre contaron con batas quirúrgicas, cubrebocas, lentes y caretas. Reconoce que al principio fue muy difícil adaptarse.
Ahora ha vuelto el 80% de los pacientes a los consultorios, pero los malos hábitos que dejó el encierro en casa, aumentó los problemas bucales, principalmente el exceso de sarro y caries, además de fracturas dentales.
“La mayoría padece sarro, porque no estuvieron lavando sus dientes adecuadamente, y aplazaron sus citas de limpieza que se hacen cada seis meses o cada año”.
- Te recomendamos La prevención para la salud bucal es sencilla Aula
La ansiedad que disparó la pandemia, también ha sido un factor en contra, pues la carga constante en los maxilares empezó a desgastar y fracturar los dientes y es una de las principales causas de consulta, comentó la profesionista.
Este 9 de febrero se conmemora en México el Día Nacional de los Dentistas, quienes se consagran a su patrona, Santa Apolonia, ya que antes de su muerte, le arrancaron todos sus dientes.
La experta en salud bucal sostuvo que la emergencia sanitaria, sin duda ha dejado secuelas, principalmente en el ámbito económico.
“En el rubro odontológico bajaron los ingresos, aunque los colegas van reforzando sus estrategias para salir adelante; el año pasado en los meses de octubre y noviembre comenzó a observarse mayor movimiento en la atención, porque la gente ya iba con la confianza de atenderse y llamaba para agendar sus citas”, refirió.
Dijo también que es triste el hecho de que en lo que va de la contingencia, se perdió la vida de muchos colegas, sobre todo de más de 60 años. “La mayoría tenía arriba de 60 años; fue una situación inesperada para todos, a pesar de que los dentistas nos la vivimos protegidos con cubreboca, guantes, lentes, careta y bata”.
La zona conurbada cuenta con tres colegios de dentistas, y el que ella preside, está conformado por 50 colegas. Ante las circunstancias tuvieron que adaptarse a los cambios, y agregar los protocolos de seguridad, como la toma de temperatura y la aplicación del gel antibacterial, además de mantener áreas desinfectadas y en algunos casos modificar horarios de atención.
“El tiempo con el paciente también cambió, pues tuvimos que modificarlo para cuidarnos. La idea principal era evitar tiempos prolongados; ahorita ahí vamos sobre la marcha adecuando los hábitos con esta nueva normalidad”, señaló.
Enfatizó que la gente tenía mil temores, por lo que los dentistas no eran la prioridad de la población, así que postergaron sus citas y por consiguiente descuidaron su salud bucal, sobre todo la limpieza dental.
“Ahora que retomamos las actividades presenciales y vamos dando ritmo al trabajo, se observa ese descuido más en adolescentes y niños, y en el grupo colegiado lo comentamos porque se perdieron los hábitos; si es que se lavaban los dientes, a lo mejor, solo eran pocos días a la semana, y eso se debía al encierro en casa, a tener al alcance la comida, lo que propició el acumulamiento de sarro, y por consiguiente la presencia de caries”, insistió.
Luna Lambarria, detalló que este desorden se notó en la higiene personal y que la ansiedad sigue siendo el mayor daño que padece la población.
“La prioridad en el paciente debe ser la limpieza dental cada seis meses, y resolver los problemas de fractura, así que te puedo asegurar que en consulta estamos a un 80%”.
En cuanto al Día Nacional del Dentista, manifestó que están en continua educación, y actualizando la labor que día a día ejercen.
Por último, hizo un reconocimiento a todos sus colegas y los instó a que sigan con la encomienda de seguir creando sonrisas sanas, porque la salud bucal es también una prioridad.
“Recordemos que la infección del covid-19 entra precisamente por la saliva, así que hay que evitar que microorganismos afecten; los enjuagues bucales y la supervisión médica, son necesarios”, dijo.
ICGC