A su corta edad, Dulce Marisol sabe lo que es acudir todos los días a un hospital y tener que olvidar por un momento sus muñecas y de jugar como cualquier niña; desde hace dos años la pequeña lucha contra el cáncer.
En enero de 2020, su vida y la de su familia cambió, de pronto la pequeña Dulce sintió debilidad en sus piernas, dolor de cabeza, de huesos y otros síntomas que alertaron a su madre; fue diagnosticada con leucemia linfoblástica cuando apenas tenía cuatro años.
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“Muy difícil para esa edad, se entiende que ellos quieren jugar, divertirse, brincar. Ella a partir de enero le diagnosticaron esa enfermedad y en febrero nos la pasamos internadas, porque no podía caminar, se puso muy grave, se le dificultó el cáncer”, contó su madre, Marisol Ramírez.
Luego de un año y nueve meses de tratamiento, la pequeña lucha contra la enfermedad.
Dulce Marisol dijo que de grande sueña con ser veterinaria.
¿Qué quieres ser de grande?
-Veterinaria.
¿Te gustan los animalitos?
-Los perros, chiquitos.
En todo momento su mamá ha sido honesta con su hija respecto a su padecimiento.
“Vamos a mitad de camino, ella siempre le ha echado muchas ganas y sigue con esa misma fuerza, y seguimos con esa misma unión con toda la familia, amigos y con todas las personas que nos han ayudado.
“Ella está enterada de su enfermedad, de los tratamientos, del tiempo que todavía le falta, del tiempo que hemos llevado”, dijo su madre.
A través de la página Unidos por Dulce Marisol la comunidad e instituciones han ofrecido apoyo a la familia, además de establecer contacto con otros padres que están en la misma situación.