Para muchas personas contar con adultos mayores en la familia y el hogar es una bendición, ya que los consideran valiosos, inteligentes, con mucha experiencia sobre la vida y una fuente inagotable de amor. Para otros solo representan desprecio, una carga económica y en general un estorbo para continuar con su vida, siendo una gran cantidad de ellos víctimas de abusos y maltratos.
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Por lo menos un tercio de la población mayor de 60 años en este país sufre algún tipo de violencia, de acuerdo con diversos estudios de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Por esta y otras razones, la Organización de las Naciones Unidas instituyó desde el 2006 el 15 de junio como “Día Mundial de la Toma de Conciencia del Abuso y el Maltrato en la Vejez”. Esto con el objetivo de promover el reconocimiento de la dignidad de las personas de edad y su derecho de vivir sin miedo ni violencia.
Es un sector vulnerable al que todos deberíamos de procurar y proteger porque ellos fueron el inicio de las generaciones de ayer y su descendencia hoy.
Abandono
El procurador del Menor, la Mujer y la Familia del Sistema DIF Tampico, Luis Llorente Herrera, señaló que lo que más se está presentando es el abandono de las personas de edad avanzada por parte de sus familiares.
Al grado que muchos son olvidados en la vía pública, en los hospitales, o al interior de una vivienda, sin que nadie les ofrezca comida, un vaso con agua ni se preocupe por su bienestar.
“El mayor problema que estamos teniendo es el abandono de los abuelitos; tenemos muchas quejas en torno a esta situación, en donde su propia familia los está abandonando. “Ya que aseguran que aparentemente fue un mal padre o madre, por lo que no sienten suficiente cariño o amor por ellos y resultan para muchos un estorbo.
“Ya que tienen que salir a trabajar, visitar a los amigos, o simplemente no quieren hacerse cargo de ellos. “La verdad, además del abandono físico y emocional, los quieren despojar de sus bienes, como es la tarjeta de débito donde le depositan su pensión o los apoyos del gobierno federal”.
A endurecer sanciones
Recalcó que ante el grave índice de abuso y maltrato que se está cometiendo en perjuicio de los adultos mayores, es necesario que los próximos diputados locales endurezcan las sanciones.
Para toda aquella persona o familiar que abuse, maltrate, abandone o despoje de sus bienes a cualquier adulto mayor.
Ya que al visualizar los victimarios que casi nunca se castiga estas faltas por desinterés de los funcionarios encargados de impartir justicia y la no aplicación de la ley, se siguen registrando situaciones como las expuestas anteriormente.
“Los nuevos diputados locales deben revisar este tema porque es delicado, creciente y los familiares no están abandonando a cualquier persona, es un miembro de su núcleo cercano y directo.
“Por eso digo que debe modificarse la ley para que se incrementen las penalidades, ya que actualmente no se considera un delito grave y solo alcanza de meses a menos de cinco años de prisión.
“Por eso muchas personas se atienen a esto y siguen perjudicándolos, pero hay que enseñarles que no se pueden meter con un adulto mayor y que afectarlos tiene castigo”.
Llamado
Hizo un llamado a los hijos, nietos y familiares de las personas de la tercera edad a que respeten, quieran y procuren a sus abuelitos, ya que no toda la vida serán jóvenes y en algún momento llegarán a la vejez.
“Los jóvenes y adultos deben tratar bien a las personas de edad avanzada, dar el ejemplo a sus hijos de humanidad, tolerancia, apoyo y amor hacia los adultos mayores.
“La vida da muchas vueltas, y debemos tener en cuenta que lo malo que hoy hacemos lo podemos recibir mañana” recalcó.
Impulso de programa
Al reconocer que el abuso y maltrato contra los adultos mayores es una situación delicada y creciente en la actualidad, el abogado del sur de Tamaulipas, Alfonso Moreno Castillo, señaló que es medular que el Gobierno de Tamaulipas impulse un programa en donde se concientice a las familias en el respeto y cuidado del adulto mayor.
Y sobre todo que se busque prevenir conductas antisociales contra este sector vulnerable. Expuso que ante esta situación se deben reunir los sistemas DIF de cada municipio, la Comisión Estatal de Derechos Humanos, la Fiscalía de Justicia del Estado, entre otras dependencias encargadas del orden y el bienestar familiar, ya que la única forma de que las cosas se transformen es que todos trabajen en conjunto para conseguir la protección constante de los adultos mayores.
“El gran problema de esta situación es que la víctima depende del victimario; es decir, muchas de las ocasiones la persona de la tercera edad depende del sobrino, del nieto, del medio hermano o incluso del familiar de la casa en donde vive.
“Ahí lo golpean, lo maltratan y no le dan en ocasiones de comer, e incluso le roban su dinero, pero no se van a encontrar muchas carpetas de investigación por estos delitos porque callan por temor y no denuncian.
“Te puedo decir que en muchas de las ocasiones a veces las víctimas padecen el Síndrome de Estocolmo; es decir, hay cariño o amor hacia su familiar que lo maltrata”.
Manifestó que en el programa de concientización social de cuidado a los adultos mayores, se debe difundir por todos los medios posibles los abusos de los que pueden ser víctimas, bajo qué condiciones se pueden convertir en delitos, a dónde pueden acudir a denunciar o llamar para exponer su caso y qué tipo de protección se les puede brindar, ya que es necesario y urgente un esquema de apoyo.