Juguetes tradicionales en NL, una opción que se mantiene viva en Día de Reyes

Casa Villegas, vigente desde hace más de 100 años, mantiene vivas las tradiciones mexicanas.

Sarita mostró la diversidad de juguetes que aún pueden brindar momentos de alegría tanto a grandes como chicos. Fotos: Leonel Rocha
César Cubero
Monterrey /

En una época donde predomina lo electrónico o virtual, los juguetes tradicionales mexicanos se mantienen como una opción durante el año o en fechas como Navidad o Día de Reyes.

Lugares como Casa Villegas, con más de 100 años de existencia en Monterrey, conservan dentro de sus productos la venta piezas como los baleros o yoyos de madera, así como los típicos juegos de mesa mexicanos de la lotería, las damas, y las tablas de serpientes y escaleras.

Con más de 57 años laborando en este negocio, doña Sarita, con una actitud y energía envidiables, aseguró que sí acude clientela para comprar a sus niños algo por el Día de Reyes, aunque septiembre, dijo, es el mes más fuerte para ellos.

"Todos los días vienen y se llevan baleros, yoyos, trompos, los panderos, todo lo de tradición de madera.
"Y sí, también asisten en estas fechas de Reyes a comprar sus juguetes, no como hace unas semanas, pero sí vienen, aunque aquí la más fuerte es septiembre", compartió.

Encargada del mostrador, doña Sarita aprovechó para destacar la diversidad de juguetes que aún pueden brindar momentos de alegría tanto a grandes como chicos.

"Vendemos todo lo de madera, sílabas, abecedarios, ajedreces, balero de copa, la toma todo, flautas, títeres, y las matracas todo el año.
"Las guitarras, el guiñol, los maromeros, la tablita mágica, los boxeadores, la maraca de güaje, el arco con flecha", detalló.

A precios accesibles, y aunque en el área metropolitana de Monterrey el Día de Reyes no se vive con la intensidad de la Navidad, los juguetes tradicionales se mantienen vigentes ante el embate tecnológico.

Mención aparte la historia de doña Sarita, quien a sus casi 78 años de edad se erige como un ejemplo laboral y de vida.

"Me llamo Sara, pero me dicen Sarita, y aquí llevo desde el 65, 57 años, acabo de cumplir los 77 y ya ando pisando los 78.
"Aquí ando, esto es lo que me mantiene en pie y activa", precisó.

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