Para evitar que las autoridades sugieran las terapias de conversión (ECOSIG) a las o los ciudadanos que soliciten los servicios de salud o algún tipo de atención en las dependencias del estado, la coordinadora de la bancada de Morena en el Congreso local, Jessica Martínez, presentó un exhorto a las autoridades.
En un comunicado, Martínez dijo que el exhorto está dirigido al Gobernador, Samuel García, y a la encargada del Despacho de la Dirección General del Sistema del DIF Nuevo León, Gloria Ivette Bazán Villarreal, además de atender una denuncia ciudadana.
“Hace algunos días acudió a mí una familia neolonesa, quienes por diversas circunstancias en su entorno familiar acudieron a buscar apoyo al Centro de Atención Familiar (CAFAM) perteneciente al Sistema para Desarrollo Integral de la Familia (DIF), centro en el que se les brindó atención psicológica, los padres sin embargo decidieron no continuar con dicha atención, ya que en el centro antes citado les propusieron llevar a uno de sus hijos a -un centro donde se pueden revertir esas tendencias- haciendo referencia a la orientación sexual de su hijo menor”, declaró.
Martínez dijo que de permitir este tipo de prácticas de supuesta “corrección” de la orientación sexual es discriminatorio y violatorio a los derechos humanos.
“La discriminación es una conducta que lamentablemente se ha vuelto sistemática y se ha extendido en la sociedad y la cultura. Está basada en el desprecio contra una persona o grupo de personas de las cuales se tiene un prejuicio negativo o estigma relacionado con alguna característica particular de la comunidad LGBTTTIQ+ y que daña sus derechos y libertades.
“Por eso y con base en Derecho, no debemos permitir tratos discriminatorios en perjuicio de ninguna persona, por cualquier motivo o condición, pues constituye una violación a sus derechos y un hecho denunciable”, enfatizó.
En marzo pasado, Jessica Martínez presentó una iniciativa de reforma para tipificar como delito las terapias de conversión.