Si bien la presa Libertad podrá captar agua desde el próximo mes de julio, la posibilidad de extraer un metro cúbico por segundo para abastecer a la Zona Metropolitana como lo anunció el gobernador Samuel García depende de la lluvia.
Juan Ignacio Barragán, director de Agua y Drenaje de Monterrey, sostuvo que para el verano está previsto el cierre hidráulico de la obra, lo que significa que podrá almacenar líquido, pese a que los trabajos concluirán hasta el mes de diciembre.
“A partir del mes de julio estaríamos en condiciones de extraer agua, pero el volumen a extraer todavía no lo podemos determinar”, refirió el funcionario.
“Lo que dice el gobernador es que si ya puede comenzar a almacenar agua y tenemos lluvias, pues se puede comenzar a enviar agua ya a la ciudad”, agregó.
El fin de semana pasado, en una visita a las obras del embalse, el gobernador Samuel García anticipó que “podría ser muy útil en el cortísimo plazo”, ya que de acuerdo al plan estatal empezará a retener agua producto de los escurrimientos del río Potosí.
Barragán reconoció que sí es una opción, pero insistió en que la principal fuente de captación será el agua de lluvia.
“Lo que pasa es el que río Potosí es un río que normalmente lleva una cierta cantidad de agua, pero lleva poca en temporada de sequía. Entonces sí, efectivamente, lo que estaríamos buscando es que esté el cierre hidráulico para que si tenemos lluvias importantes en septiembre se pueda almacenar una cantidad importante de agua”, explicó.
La presa Libertad tendrá un 75 u 80 por ciento de avance para el mes de julio, y su conclusión está programada hacia finales del presente año.
El titular de AyD sostuvo que podrían faltar algunos trabajos “accesorios”, pero ya estaría funcional para dar servicio.
Indicó que llenar una presa toma entre 2 y 3 años, y puso como ejemplo El Cuchillo, cuya construcción terminó en 1994, pero llegó al 100 por ciento de agua hasta 1998.
Dijo que hasta el momento faltan por negociar solo 64 metros de terreno que corresponden a la cortina, pero descartó que esto retrase la entrega.
“No, porque aun y cuando no se resolvieran esos últimos 64 metros de la cortina, estaría perfectamente funcional, estamos hablando de una cortina de mil 950 metros, entonces 64 metros es nada, es un empotramiento”, comentó.
Se prevé que la presa tenga una capacidad de 250 millones de metros cúbicos y aporte hasta 2 mil litros por segundo.