El oso negro (Ursus americanus) de 7 meses que sufrió una lesión medular causada por arma de fuego, fue trasladado a la Fundación Invictus en Pachuca, Hidalgo, donde ya recibe tratamiento regenerativo en su piel y músculos, tras el daño provocado en sus extremidades por arrastrarse, al perder la movilidad, informó la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
“A su llegada, el oso de 7 meses se reportó como reactivo, aceptando alimentos y agua por voluntad propia. Le fue realizada la limpieza de sus extremidades posteriores, valoración de lesiones y se aplicaron exosomas así como plaquetas de placenta parénquimales y una matriz de fibrilina buscando con esto la regeneración de la piel y músculo que fue dañado por el arrastre que realizo el ejemplar antes de ser capturado”, detallan.
- Te recomendamos Juzgado suspende temporalmente proceso de selección del fiscal de NL Policía
En una ficha informativa, la Profepa informó a MILENIO que a las 6:00 del jueves 20 de octubre, el ejemplar fue trasladado vía terrestre al predio e instalación que maneja Vida Silvestre (PIMVS) en Pachuca, al que arribó a las 19:40, “donde recibirá atención médica veterinaria de alta especialidad".
También, explicó que se están adoptando las medidas de trato digno y respetuoso para evitar o disminuir la tensión, sufrimiento, traumatismo y dolor del ejemplar.
Además, destacó que el personal de la fundación, le tomó muestras de sangre al ejemplar, un perfil renal completo, exploración y estudios ortopédicos de respuesta de sensibilidad.
“La Procuraduría permanece en espera de que los resultados de laboratorio sean entregados para obtener el reporte completo”.
El pasado 12 de octubre, MILENIO dio a conocer que el osezno de 7 meses, especie en peligro de extinción, fue agredido con un arma de fuego dentro del Parque Nacional Cumbres de Monterrey en el municipio de Santiago en Nuevo León, por lo que perdió la movilidad de sus patas traseras.
El osezno fue visto en la comunidad Ciénega de González, en Santiago, desde el 7 de octubre, por lo que se reportó su situación a personal de Parques y Vida Silvestre de Nuevo León, a través de un breve video, en el que se observa al pequeño oso arrastrándose con dificultad, apoyado en sus patas delanteras, en dirección hacia su madre y hermano, que los esperaban al tratar de ocultarse, junto a una casa de lámina.