A los 13 años, Gerardo Martínez dejó su natal Ciudad Victoria, Tamaulipas, para buscar una vida mejor en Nuevo León.
A 36 años de aquella decisión su existencia tomó un giro inesperado al desaparecer el 31 de marzo del año 2022 su hija Yolanda Martínez Cadena.
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Desde entonces se mantiene en una búsqueda desgastante, aunque asegura que aguanta todo por encontrar a su hija.
Sentado frente al Palacio de Gobierno, bajo la estatua de Benito Juárez, don Gerardo, acompañado de su familia, agradece el apoyo de las mujeres que organizaron una manifestación para pedir justicia en el caso de Yolanda.
Asegura que caminar, trepar cerros o andar por ríos y arroyos no lo resiente porque lleva 22 años trabajando como cargador en el mercado de Abastos, en el municipio de Guadalupe.
En este sentido, se mostró también muy agradecido con sus patrones, los cuales, aseguró, le siguen pagando su sueldo completo.
A la vez que le expresaron que así se mantendrá su postura hasta que localice a su hija, joven madre cuya niña cumplió este 29 de abril 4 años.
"Me siguen dando mi sueldo, todo, es que tengo 22 años trabajando con ellos, nunca había faltado, jamás faltaba, y ahora toda mi vida rutinaria se me acabó", dijo.
¿De qué trabaja?
En el mercado de Abastos de Guadalupe, cargando bultos.
¿Qué lo mantiene de pie?
Pues mi dolor, eso es lo que me mantiene de pie.
Todos los días me levanto a las 4 de la mañana a planear y a darle.
Previo a descansar un poco de la caminata, no la de casi 3 horas del viernes sino la de 29 días, don Gerardo, a sus 49 años, y con un semblante que parece, según él, de 60 años fue tajante al precisar "no he parado y no voy a parar".