A pesar de que probablemente, no están cien por ciento recuperados de la intoxicación por comer enchiladas, Rey David Cristóbal de Jesús y Ana Laura Cruz Alejandre, originarios de Potrero del Llano, y Cerro Azul, Veracruz, respectivamente, decidieron solicitar su “alta voluntaria”.
La pareja tomó la decisión de irse del hospital pues refieren que no pueden quedarse más tiempo internados ya que tienen que trabajar.
Ellos viven juntos desde hace un año y se dedican al trabajo en campo, los dos señalan haber consumido las enchiladas que presuntamente contenían alguna sustancia tóxica, lo cual, los afectó y fueron internados en el Hospital Regional de la Huasteca junto a otros dos familiares que también viajaban en la unidad con rumbo a Querétaro, al corte de tomate.
“Veníamos hacia un trabajo de contrato, íbamos con el contratista para Querétaro, estábamos esperando gente y pasó una señora vendiendo enchiladas, comimos y eso fue lo que nos hizo daño. Mi esposo es Rey David Cristóbal de Jesús, nos dedicamos al campo, yo con él tengo un año que me junté y tengo un año con él trabajando en eso, no tenemos hijos, siempre nos hemos ido a trabajar”, puntualizó en entrevista para MILENIO, Ana Laura Cruz.
Destacó qué, debido a su necesidad por obtener ingresos, tomaron la difícil decisión de solicitar su “alta voluntaria”; en total, eran 5 familiares los que se dirigían a Querétaro a realizar trabajos en el campo, sin embargo; solo 4 consumieron las enchiladas presuntamente envenenadas.
“Nos dimos de alta, de hecho, no nos dijeron que ya nos fuéramos, pues no, pero tenemos que irnos porque tenemos que trabajar, tenemos que buscarle lo que caiga mientras nos componemos, porque mi esposo no está bien todavía y es el más afectado”.
Por su parte, Rey David Cristóbal de Jesús indicó, “Lamentablemente ya no nos vamos a poder ir a trabajar, porque vamos a estar en rehabilitación en lo que se pasa la infección que tenemos en nuestro cuerpo, pues de hecho nos dijeron que las enchiladas tenían infección de rata, es lo que nos dijeron y que por eso estábamos graves, estábamos como envenenados”.
Al cuestionarlo sobre el sabor que tenían las enchiladas o si había algún indicio de que estaban contaminadas refirió, “de hecho si, sabían un poco agrias, feo que sabían, pero uno con hambre y ese fue el detalle, fuimos varios los afectados con la comida”.
Por lo anterior, piden el apoyo económico de la ciudadanía, para solventar un poco los gastos de ellos y de sus familiares de los cuales, están en espera del reporte médico en el Hospital General de la Huasteca.