ZAO es una app china que está extendiendo a todo el mundo la técnica del deepfake o la manipulación de contenidos audiovisuales con herramientas de inteligencia artificial, que solo necesita una fotografía del usuario, y cuya política de uso plantea riesgos para la privacidad.
La app, disponible en la App Store, incluye fragmentos de cientos de series y películas con las que el usuario podrá poner a prueba la 'magia' del deepfake.
Así, con la foto, el usuario podrá ver cómo los personajes de la pantalla adoptan su rostro, de forma fluida y realista.
No obstante, la aplicación sucitó preocupación por los riesgos para la privacidad que implican sus políticas de uso. Al igual que con FaceApp, la aplicación que envejecía a los usuarios, ZAO se reserva todos los derechos sobre los contenidos que cree el usuario de forma "gratuita, irrevocable, permanente, transferible y relincenciable", como señalan en Bloomberg.
Los responsables de la aplicación han introducido una modificación en sus políticas, según el medio citado, que no usarán fotografías de rostros o mini videos que los usuarios hayan cargado "para otros fines que no sean mejorar la app o las cosas que preacordaron los usuarios".
La modificación también supone que en caso de que los usuarios eliminen de la app contenido que habían cargado, este será eliminado también de los servidores.
RL