La semana pasada las comisiones de Hacienda y Crédito Público y de Estudios Legislativos del Senado de la República aprobaron el dictamen en materia de plataformas digitales que obliga a los prestadores del servicio de video streaming a que 30 por ciento de sus contenidos sean de producción nacional y cuyo costo final tendrán que pagar los usuarios.
En entrevista con MILENIO Jorge Bravo, presidente de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi), dijo que si 30 por ciento del contenido de las plataforma va a ser de producción nacional, éste se tendrá que comprar, por lo que las tarifas pueden subir de 10 a 20 por ciento.
“El problema no está en la aprobación, sino que posteriormente va a entrar en contradicción con el acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), puede que sea inconstitucional porque está discriminando contra un sector que es el de las plataformas y va a crear mayor regulación que no le conviene al usuario”, señaló.
De acuerdo con el especialista, la propuesta del senador Ricardo Monreal tiene inconsistencias; una de ellas tiene que ver con el capítulo 20 del T-MEC, el cual refiere que las empresas que ofertan servicios digitales o electrónicos no deberán tener procedimientos burocráticos.
El proyecto se refiere a los servicios de las plataformas Over The Top (OTT) como Netflix, Amazon Prime Video, Claro Video, entre otras más como “televisión por internet”, un tema que contrasta también con la resolución del Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) que considera que el contenido de dichas plataformas no es televisión sino video.
Cifras de The Competitive Intelligence (The CIU) indican que el gasto promedio en las OTT está ligeramente por encima de la televisión restringida, con un gasto promedio de 4 mil 105 y 4 mil 45 pesos anuales, respectivamente.
“Los usuarios nos beneficiamos porque hay más oferta audiovisual, más calidad, tarifas más reducidas, cualquier OTT es más barata que cualquier sistema de televisión de paga. Hay muchas ventajas, incluso hay mejor y más diversidad en los catálogos que en un día o mes de programación de cualquier televisión, es decir, la competencia se logró por la vía de la innovación de tecnología no de la de regulación”, dijo Bravo Torres.
La iniciativa propone un plazo de revisión de cumplimiento que realizará el Ifetel en un periodo de 18 meses, aunque no se han esclarecido multas para los servicios que incumplan las disposiciones.
“Tendrán que estar midiendo que las plataformas cumplan con ese porcentaje, ni siquiera las televisoras comerciales abiertas que tienen espectro están obligadas a cumplir esta regulación”, explicó el presidente de la Amedi.
ledz