Ahora que un gran porcentaje de la población en México está trabajando y estudiando desde casa, la gran duda es si la red de conexión a fibra óptica e internet en general podrá soportarlo.
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Tras las medidas de distanciamiento físico que empiezan a implementarse en ciudades del país, que se han activado durante las últimas semanas por el incremento de casos vinculados al Covid-19, la red de conexión de uso doméstico ha registrado lentitud.
Sin embargo, el director de Nic México, Jorge Adrián Azzario Hernández, descartó que está pueda saturarse.
“La red en México conecta al 70 por ciento de la población, hay diferentes tipos de infraestructura, cableada y fibra óptica (…) pero está en muy buena posición tanto en infraestructura como arquitectura”.
Otro porcentaje de la red en las zonas urbanas ya es cableado o en algunos casos de cobre y que pueden ser los más susceptibles a presentar algo de saturación o lentitud; también está la fibra óptica.
Enfatizó que México tiene una buena infraestructura de redes que ahora con la presencia del Covid-19, sin duda, podrá aguantar.
De acuerdo con la firma de consultoría especializada en telecomunicaciones, The Competitive Unit, en México, 47 de cada 100 hogares disponen de la telefonía fija para comunicarse, (datos al tercer trimestre de 2019); mientras que, en el caso de las unidades económicas, quienes opten por asistir a su oficina en estos días podrían contar incluso con más de una línea fina, al registrarse un nivel de acceso de 110 líneas por cada 100 empresas.
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Analistas de esta consultoría señalaron que, en estos días, las redes fijas tendrán que demostrar su capacidad para dar soporte a la creciente cantidad de comunicaciones e interacciones realizadas desde el hogar e incluso probablemente este fenómeno sanitario traerá consigo un alza en la contratación de estos servicios.
Y es que el tráfico telefónico y velocidad descarga de datos en redes fijas, en un comparativo anual, registró una caída de 2.9 por ciento en los minutos de llamadas (locales, larga distancia nacional e internacional) cursados en redes fijas, durante el tercer trimestre de 2019, es previsible un repunte durante la primera mitad de 2020, como consecuencia del brote y contagio del coronavirus entre la población mundial.
En contraste, la demanda por mayores capacidades y velocidad de descarga de datos en redes fijas se traduce en que la contratación de accesos con velocidades de descarga superiores a los 100 Mbps (megabits por segundo) representan ya cuatro por ciento del total, 1.6 puntos porcentuales más que el año anterior.
El grueso de conexiones se encuentra en el rango de velocidad entre los 10 y 100 Mbps, al registrar una proporción de 89 por ciento del total.