El primer nanosatélite mexicano en el espacio, AztechSat-1, desarrollado por investigadores y estudiantes de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep) comenzó sus operaciones que consiste en recoger información y en comenzar a mandarla a una estación terrena ubicada en la angelópolis.
Después de que los astronautas de la Estación Espacial Internacional colocaron en el espacio al nanosatélite mexicano durante las primeras horas de este miércoles 19 de febrero, inició el proceso para realizar conexión con el satélite.
Erika del Carmen Sevilla García, investigadora de la Upaep, explicó que el aparato de categoría CubeSat puso en funcionamiento un sistema de comunicación intersatelital, único en su tipo a nivel mundial, para realizar pruebas de comunicación.
Tras el lanzamiento del 5 de diciembre de 2019, el nanosatélite poblano fue llevado hasta la Estación Espacial Internacional por la cápsula Dragón, como parte de una misión de la compañía SpaceX de Elon Musk, con apoyo de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio de Estados Unidos (NASA, por sus siglas en inglés) y de la Agencia Espacial Mexicana.
“Hoy inicia operaciones, todavía, estará de tres a seis meses en el espacio y pronostican que el cierre del proyecto podrá realizarse en agosto. Vamos a operar la misión y dependiendo de las circunstancias se decide si se hace el cierre del proyecto y donde podamos compartir la información”, comentó.
Detalló que, después de 40 minutos de ser lanzado a órbita se encendió un mecanismo electrónico que inició su operación y los primeros datos que emitirá serán informes sobre su estado general, temperatura y presión del lugar donde se encuentra y el nivel de batería.
“Todos estos datos los guardará en un archivo y los transmitirá como carga útil a través de dos modos: del satélite a la constelación Global Star y a la Estación Terrena ubicada en los laboratorios de la Upaep”, explicó la investigadora.
Señaló que la misión del nanosatélite es demostrar la eficiencia en la comunicación y el envío de datos a través de la constelación Global Star, con el fin de que en futuras misiones deje de ser necesario tener una estación terrena para descargar datos desde cualquier satélite.
Agregó que en la Estación Terrena ubicada en la universidad poblana ya trabajan estudiantes y profesores de Ingeniería Aeroespacial, Ingeniería Mecatrónica, Ingeniería Biónica, Ingeniería Electrónica y Telecomunicaciones, quienes serán los encargados de descifrar los datos enviados por el nanosatélite.
El satélite tiene instalado dos sistemas de radiofrecuencia: con el primero establecerá contacto con Global Star, la constelación internacional de satélites; mientras que con el segundo contactará a la Estación Terrena de la universidad.
mpl