La red de trata prometía a sus victimas colombianas una oportunidad de trabajo bien remunerado en el sur de México.

Un hombre fue detenido en Ixtlahuaca por obligar a una adolescente de 17 años a tener relaciones sexuales.

Las víctimas eran engañadas con un presunto trabajo en un hotel cinco estrellas de Cancún.

Las hermanas González Valenzuela controlaban una red de trata entre Jalisco y Guanajuato. Secuestraban a jóvenes, las esclavizaban, torturaban y luego asesinaban por “inservibles”.

El cateo se dio después de algunas sospechas de que en el establecimiento operaban redes de trata de personas.

México parecía reunir las condiciones perfectas para la pandilla venezolana que sigue la huella de la migración. Pero un doble feminicidio desarticuló su célula principal en el país.

Una violenta organización criminal que monopoliza y monetiza con la venta del etnoporno en el sureste mexicano: el Cártel Chamula, el primer y único cártel indígena en México.

De acuerdo con la fiscal de Delitos de Género y Trata de Personas, las mujeres y los menores de edad son las principales víctimas.

Hombres de países de primer mundo viajan a destinos como México, Colombia o Filipinas para encontrar a mujeres "dóciles", o incluso abusar de menores.

El hombre fue detenido por fines de explotación sexual agravada en grado de tentativa.