La esposa del opositor Leopoldo López abandonó hoy junto a su hija la embajada española, donde residía como huésped desde el 30 de abril.

El líder opositor detalló que en la llamada le agradeció a Piñera su apoyo "al cese a la usurpación", y el presidente de Chile lo alentó a "terminar la dictadura".

El gobierno español anunció que no entregará a las autoridades venezolanas al opositor, pero no permitirá que la Embajada se convierta "en un centro de activismo político".

El líder opositor pidió a la Fuerza Armada, así como a "quienes hoy están acompañando a la dictadura" que tengan la certeza de que los opositores no van "a ir en un proceso de cacería de brujas".

El Ejecutivo afirma que López, su esposa y su hija, de 15 meses, se encuentran en la residencia del embajador de España en Caracas por voluntad propia y en calidad de "huésped"; el opositor dijo que no quiere volver a prisión y descarta pedir asilo.

El líder opositor reapareció a las puertas de la residencia del embajador español en Venezuela, Jesús Silva, luego de que un tribunal de Caracas ordenara su captura tras haber violado su arresto domiciliario.

El Tribunal Supremo de Venezuela ordenó la captura del opositor por no cumplir la enmienda de arresto domiciliario y ser liberado por un "indulto presidencial" de Juan Guaidó.

Según testigos, los sujetos que entraron a la casa del opositor venezolano fueron identificados como miembros del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional.

El comentario llega después que el Ministerio español de Asuntos Exteriores anunció que tanto Leopoldo López, como su esposa, Lilian Tintori, y su hija de un año y tres meses se encuentran en la sede diplomática española, en Caracas.

El gobierno español confirmó que el líder opositor se trasladó a la sede diplomática junto con su esposa y su hija, luego de abandonar ayer la embajada de Chile.