El Congreso local lanzó un exhorto para que se autorice la reapertura de los establecimientos, con la finalidad de generar la reactivación económica gradual en el estado.

Con una protesta y marcha, trabajadores y dueños de este giro piden apoyo al gobierno al tener ya siete meses sin trabajar.

El secretario de Salud declaró que no cederán ante las presiones de reactivar giros donde se realicen eventos que aglomeren a muchos ciudadanos.

Los dueños de salones de fiesta señalaron que es injusto que permitan abrir a otros negocios de giros similares donde también acuden niños.

El gobernador Jaime Rodríguez dijo que si el semáforo covid-19 avanza de manera positiva esta semana, existe la posibilidad de abrir los centros de entretenimiento con algunas restricciones para evitar más contagios.

Los manifestantes expresaron que si no los “mata el covid-19, los matará el hambre”.

Manuel de la O Cavazos señaló que esos lugares tienen alto riesgo de contagio entre los asistentes, por lo que pidió tener paciencia ya que no permitirán la apertura.

La asociación Salones Unidos de Nuevo León exigió al Estado la reapertura inmediata de los salones de fiesta, al argumentar que se les había prometido una reactivación del sector el pasado 15 de agosto.

Acordando los lineamientos a seguir para el regreso a la nueva normalidad, la solicitud para su reapertura se hace con fecha tentativa del 15 de junio.

Negocios que no acaten la disposición serán clausurados.