De acuerdo con los pobladores del lugar, de un momento a otro, las calles se convirtieron en ríos y el agua con lodo entró intempestivamente a sus hogares alcanzando casi el metro de altura.

El grupo de encapuchados ingresó señalando que presuntamente solo iban a realizar una revisión, sin embargo, los agresores tomaron urnas y papelería de votación para después salir corriendo.

Por lo que se presume, mientras estaba jugando, el pequeño cayó por accidente al canal de riego donde perdió la vida.