¡Una pesadilla! Mujer termina en silla de ruedas tras tener una cita romántica: "sólo pensé: éste es el final"

Kiaha Kurek es una mujer de 35 años que tiempo atrás vivió el peor momento de su vida luego de aceptar una cita con un hombre que le mintió desde un inicio.

Kiaha Kurek sufrió accidente. | ESPECIAL
Ciudad de México /

Las plataformas de citas son un opción para quienes buscan el amor, pasar el rato o simplemente conocer gente, aunque siempre es importante tomar precauciones porque finalmente se trata de reunirse -eventualmente- con un completo desconocido.

Sin embargo, a veces pecar de inocente puede salir caro ya que una mujer terminó en silla de ruedas luego de que aceptó una cita a través de una plataforma dedicada a juntar corazoncitos solitarios. Aunque las cosas no salieron como esperaba.

De acuerdo con el relato de Kiaha Kurek, mujer de Hawai, ella estaba dada de alta en la aplicación “Plenty of Fish”, donde conoció en 2012 a un hombre que le pareció una buena opción para entablar conversación y hasta conocerse en persona.

Él dijo que tenía 24 años y ella en ese entonces tenía 25 años, tras ello quedaron de verse y fue cuando comenzó la pesadilla de Kiaha ya que tras la cena irían al cine, pero este hombre comenzó a conducir de una manera bastante apresurada, pues iba a 80 kilómetros por hora.

Esto eventualmente terminó en un aparatoso choque, ella estaba “sentada en el auto, viendo faros que venían hacia mí y pensando: ‘este es el final’”, de acuerdo a lo declarado en SWNS y relató que sus “ojos ardían porque la sangre goteaba en ellos. Pude escuchar un fuerte ruido cuando el auto fue abierto”.

Posteriormente fue llevada para recibir atención médica y comenzar un tortuoso proceso de recuperación, incluso debió regresar con sus papás porque no era autosuficiente ya que la cirugía fue dolorosa, aunado a que le dieron una posibilidad de no volver a caminar normalmente ya que se rompió la pelvis, costillas y una pierna quedó sumamente lesionada.

Así que inició con una silla de ruedas, luego muletas y finalmente un bastón, aunado a que terminó con una deuda superior al millón de dólares por lo que está en bancarrota. El responsable solamente se disculpó pues apenas acababa de recibir su licencia de conducir y además tenía 19 años. Kiaha decidió no demandar.



KVS

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