De la selva verde a la de asfalto: tucán escapa de refugio en la CdMx

Rescatistas piden a capitalinos colaborar con la localización del ave, que ha sido vista en el Desierto de los Leones, Las Águilas, Bosques de las Lomas, en colonia Escandón, Tecamachalco y Tlatelolco.

Piden ayuda para localizar a Mariano el tucán. (Tomado de Twitter)
Ciudad de México /

En esta selva de asfalto llamada Ciudad de México no sólo hay helicópteros, drones y sonidos de claxon, recientemente capitalinos vieron volar de árbol en árbol a un tucán al que en redes ya se conoce como Mariano.  

Desde el 24 de junio, un usuario de Twitter compartió una imagen del ave: "Hay un tucán en mi ventana". A él se sumaron otros vecinos de la zona difundiendo videos del ave que volaba de árbol en árbol.

Aunque hay reportes de su avistamiento desde mayo, la noticia de inmediato se viralizó este mes y pronto se dio a conocer que el ave se llama Mariano, un tucán pico iris rescatado del comercio, que escapó desde abril del refugio en donde estaba.

De acuerdo con rescatistas, Mariano ha sido visto en la zona poniente de la capital como el Desierto de los Leones, Las Águilas, Bosques de las Lomas, colonia Escandón y Tecamachalco, aunque también fue visto en Tlatelolco y en la Narvarte. 

¿Cómo puedes ayudar a Mariano?

Es importante que no lo alimentes ni lo captures, ya que otros animales como perros, gatos u otras aves, incluso humanos, pueden poner en riesgo la vida de Mariano. 

Mejor llama a la Profepa al 5554496300 y si es posible, tómale una foto y compártela en redes sociales a través del hashtag Mariano El Tucán para que así pueda regresar a su refugio.

Recuerda que este tipo animales debe pasar por un proceso de adaptación a su ambiente natural.

Es importante que Mariano no deambule entre árboles y cableado de la ciudad, ya que puede provocar efectos graves en las poblaciones de aves que habitan aquí.

Ésta no es la primera vez que se observan especies exóticas en la capital, en 2018 habitantes de las colonias Lomas de Chapultepec y Lomas de Reforma vieron a un mono capuchino que vagaba por ahí. 

El mono pasó varios días saltando de árbol en árbol huyendo de las autoridades, hasta que por fin la Profepa lo capturó, aunque en condiciones deplorables: tenía pulgas, estaba flaco y con una fractura en el diente. 

Luego de ponerlo en cuarentena, el primate fue puesto con demás ejemplares en el zoológico de Chapultepec, donde permanece hasta la fecha.  

EB

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