Encuentran víbora de cascabel y la dejan sin vida en el edificio del Congreso

Fauna

La especie protegida no recibió un trato adecuado para su captura y posterior liberación; el estudio de impacto ambiental del Palacio fue “empírico” y “bibliográfico".

Foto: Especial
Guanajuato /

Una víbora de cascabel, especie protegida en México, fue encontrada en el edificio de la Cámara de Diputados en la ciudad de Guanajuato. El especimen no fue manejado adecuadamente, y terminó sin vida en el fondo de una cubeta.

Esa especie está catalogada de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana NOM-059-Ecol-2001, relativa a la protección ambiental de especies silvestres nativas.


Al ser una especie protegida, de acuerdo con el artículo 420 del Código Penal Federal, se sanciona con “pena de uno a nueve años de prisión y por el equivalente de trescientos a tres mil días multa”.

Falta capacitación: Gutiérrez

La diputada Alejandra Gutiérrez Campos se refirió al hallazgo: “hay que revisar qué pasó”, refirió en entrevista.

La legisladora admitió que “en la mayoría de los lugares donde se construye cerca de la naturaleza es común la presencia de fauna silvestre”.

Por lo anterior, se pronunció por “capacitar a la gente para que sepa qué hacer cuando se encuentre un animal de estas características en el Congreso”.

Gutiérrez Campos refirió: “hay personal de Protección Civil capacitado. Hay que dar aviso a Protección Civil, sin poner en riesgo a las personas ni agredir a los animales”.

El análisis de impacto ambiental “empírico” y “bibliográfico”

Llama la atención la Manifestación de Impacto Ambiental, presentada para la construcción del Nuevo Palacio Legislativo de Guanajuato registrada ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) con el folio 11GU2009UD050.

Incluso, la Manifestación afirma: “de las especies observadas no existe ninguna que esté bajo la protección dentro de la NOM-059-Semarnat-2001 (sic).”

Asimismo, se menciona que el sitio no pertenece a ninguna Área Natural Protegida, no existen ecosistemas frágiles, no atraviesa zonas de alto riesgo con problemas de degradación de suelo y biodiversidad”.

Más adelante, en el apartado de la fauna, el documento hace alusión que según la Fundación Ecológica de Guanajuato, “en la sierra de Santa Rosa reporta más de 172 especies de aves”, mientras que “de reptiles y anfibios han inventariado 20 especies de 12 familias”, sin precisar cuáles.

Se agrega que “durante los recorridos de muestreo y al efectuar entrevistas a los operadores de los tractores que participaron durante la apertura del proyecto, pudimos conocer que estos no se toparon con algún tipo de animal silvestre”.

Sin embargo, no descartaron “la posibilidad de que algún otro operador haya visto alguna clase de animal, pero según el personal de maquinaria no les fue reportado ningún avistamiento de fauna en el área de trabajo durante la apertura”.

Luego, llega a la conclusión de que “los animales se alejaron al sentir la presencia de la maquinaria y personas”, y más aún: reconoce que “no se efectuó un estudio por especie” y que “hace falta un estudio de fauna que sale del alcance y costo de este estudio de afectación”.

Se admite que “el análisis de fauna para este estudio se efectuó a través de una consulta bibliográfica y de las observaciones de campo y comentarios de las personas”.