El problema de antaño que no se ha podido resolver en Tampico es la pinta de grafitis en los negocios de la principal avenida, situación que da un mal aspecto a esta ciudad turística y comercial.
En un recorrido por la avenida Hidalgo se ha logrado contactar que existen hasta 90 locales con garabatos realizados con pintura en aerosol, de los cuales en promedio tienen tres dibujos o letras, pero hay quienes cuentan con una pared más extensa y llegan a tener hasta ocho.
Ya se han aplicado algunas estrategias como la autorización de pintas en paredes en específico, pero con imágenes representativas de la ciudad por parte de artistas de la zona, sin embargo no ha sido suficiente pues continúan llevando a cabo estas acciones negativas.
En parte a este conflicto también se debe al descuido de los propietarios, quienes tienen sus locales desocupados y no les han dado el mantenimiento necesario, lo que facilita a desconocidos ingresar o rayar durante las madrugadas.
Es a la altura de la avenida Valles donde se encuentra uno de los recintos con mayor número de grafitis, sin que hasta el momento se tenga el registro de detenciones por estos daños que causan en la vía pública
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Mediante el Gobierno local también se han aplicado programas de pintura en edificios y locales, con el propósito de borrar todas aquellas escrituras sin sentido, aunque lamentablemente al siguiente día vuelven a aparecer igual.
De acuerdo a los testigos que viven a los alrededores, esto también representa un riesgo para los jóvenes que disfrutan de cometer este tipo de actos delictivos por daño a la propiedad agenda, ya que se las ingenian para subir hasta los segundos pisos, incluyendo edificios antiguos y hay riesgo de que puedan caer.
Martha López, quien reside sobre la avenida Hidalgo, destacó que ha reportado al teléfono de emergencias del 911 pero la policía no acude y los "vagos" logran su cometido, además de que luego dejan las latas de pintura en los patios aledaños.
"Aquí los vemos pero la policía no hace nada, les decimos y no vienen, nos piden muchos datos, casi casi quieren que les digamos los nombres de los jóvenes que pintan, por eso ya mejor ni les marcamos, esto siempre ha pasado".