El suceso tuvo lugar la tarde del viernes en el Acceso Oeste y Repetto, en el límite entre Hurlingham e Ituzaingó, Argentina. Cuando dos hombres tuvieron un accidente automovilístico y lo que podría haber sido solo una discusión por inconformidad, terminó en un asesinato.
Según los testigos, todo ocurrió cuando Martín Pastorino (30 años) golpeó el carro de Félix Oviedo Aguilera (27 años), quién viajaba con su esposa embarazada en el asiento de su acompañante. Los involucrados se bajaron de sus automóviles y comenzaron a forcejear.
Quien inicialmente llevaba la barreta de metal, era Pastorino, sin embargo, entre un mar de golpes, gritos y amenazas, el fierro cayó al suelo sin que nadie le diera mucha importancia hasta que Aguilera alcanzó a tomarlo.
La tragedia ocurrió segundos después, cuando, cegado por la ira y descontrolado por el enojo, Félix atinó un golpe justo en el cráneo de Pastorino, lo que produjo un corte profundo y la pérdida de masa encefálica, lo que le ocasionó a la víctima una muerte casi instantánea.
Momentos después acudió la Comisaría 4ta de Hurlingham, quienes procedieron a detener a Aguilera, también intervino la Unidad Fiscal de Instrucción N°6 de Morón, a cargo de Nicolás Filippini, quienes ordenaron su detención por "homicidio por discusión de tránsito".
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¿Qué dijeron los testigos al respecto?
De acuerdo con relatos de algunos testigos, Aguilera acusaba la victima por haber intentado agredir a su pareja, quién está embarazada de nueve meses, a ello, Pastorino le respondió "No sabes con quien te metiste, te voy a matar”.
Luego de una discusión las cosas parecían haberse calmado cuando Aguilera arremetió contra Martín con la barra de metal, le dio un golpe seco, que primero el causó convulsiones y después, la muerte instantánea.
Félix, en el suelo, con el torso al aire, a un lado de la víctima se dio cuenta de lo que había pasado y entre el shock y el miedo solo pudo decir: "No lo puedo creer, ahora qué voy a hacer, voy a ser padre. Me cebé”.
LH