Murió 'Súper Paco', el abuelito runner que retó a la vida

El hombre participó en carreras de 100 kilómetros. Es considerado como un símbolo del deporte, pues su vestimenta era muy diferente a la esperada para un deportista.

Contreras, en marzo en una prueba en Cártama. /El Mundo
El Mundo
Ciudad de México /

El carismático corredor (running), atleta y malagueño Francisco Contreras Padilla, mejor conocido como Súper Paco, falleció a los 81 años a causa del cáncer

La inconfundible silueta encorvada y el carácter cordial, propio de un hombre que vivía en armonía con la naturaleza, calaron hondo en los aficionados a las carreras de ultrafondo.  

El Ayuntamiento de Cártama, la localidad natal de Contreras, confirmó la muerte de Súper Paco, una de las grandes atracciones de las últimas ediciones de los 101 kilómetros de Ronda. En la edición de 2014 de esta prueba de ultrafondo, los participantes acuñaron el popular apodo.

La mencionada prueba malagueña, organizada por La Legión para completarse en 24 horas, multiplicó la popularidad de Contreras, que acostumbraba a competir con el sencillo atuendo propio de los hombres de campo. 

"La gente me da mucho mérito, pero soy igual que los demás. La fuerza de voluntad es lo que cuenta", comentaba a EL MUNDO en mayo de 2015, pocas horas antes de afrontar otro desafío en la serranía de Ronda.

El peculiar entrenamiento de 'Súper Paco'

Un problema de salud diagnosticado en 1999 aceleró el paso de Súper Paco al ultrafondo. Tras dejar de consumir carne de cerdo, ajeno a cualquier bebida a alcohólica, su dieta se limitaba a la fruta, las verduras y el pescado. 

Los vecinos de Cártama ya se habían acostumbrado a su figura por el monte, donde se entrenaba cada fin de semana con una marcha nocturna de 40 kilómetros.

En mayo de 2016, Francisco e Inés Contreras, dos de sus hijos, publicaron un libro titulado Súper Paco. Kilómetros de Vida. 

En él se recogían multitud de historias de su vida personal, desde sus tareas domésticas con limoneros y olivos, hasta sus hábitos en los entrenamientos, a los que acudía con agua, un puñado de frutos secos, además de un móvil y un frontal de luz para las urgencias.

​grb 

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