Las redes sociales no son tan inofensivas como uno piensa, en ocasiones el querer bromear o entretener a los internautas puede salir muy caro y tener grandes consecuencias como perder un empleo. Así le pasó a un joven que expuso su caso en TikTok.
Nickolas Cruiser nunca se imaginó que una broma para poder cerrar a tiempo la tienda en la que era empleado, le terminaría costando su trabajo: “Me despidieron por este clip”, afirmó el joven estadounidense.
El joven ex empleado de una tienda de artesanías y telas explica que decidió hacerle una broma a los clientes que seguían dentro del local a pesar de que había pasado la hora de cerrar. A Nick se le hizo fácil usar el altavoz para ahuyentar a los compradores fingiendo una voz más tétrica.
“Había 12 personas en el local. Yo anuncié en tres ocasiones que estábamos a punto de cerrar, entre las 20:30 y 21. Pero aún así no se iban", dijo Nick al poner en contexto de por qué decidió jugar con el altavoz de la tienda. "La tienda ahora está cerrada. Ya pasaron 15 minutos de nuestro horario de cierre", se escuchó en todos los altavoces de la tienda.
"Si todavía permanecen aquí, significa que están invadiendo un terreno privado, un delito federal. Déjenme aclararles algo: a sus madres no les gustaría que aún siguieran aquí", añadió Cruiser fingiendo tener otra voz más como un psicópata.
Sin embargo, la broma no terminó ahí, pues Nick decidió seguir usando el micrófono para hacer sus insistentes advertencias pero de una forma poco común: "Váyanse, ahora mismo. Si no lo hacen, los voy a buscar y localizar... porque soy la seguridad de este negocio y me vuelvo loco con las personas que no tienen permiso para estar aquí. Me voy a volver loco con vosotros".
Como era de esperarse, los clientes que se encontraban decidiendo qué comprar presentaron una queja ante el jefe de Nickolas, quien le pidió que “no fuera más a trabajar”. El video compartido en TikTok suma más de dos millones de reproducciones y miles de comentarios con opiniones dividas.
jk