A partir de los 20 años de edad, es importante que las mujeres empiecen a autoexplorarse los senos para conocer esa parte de su cuerpo y que, en caso de encontrar una anomalía, sean capaces de ir con el especialista pertinente para descartar problemas de salud, como es el cáncer de mama.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informa que en 2020 el cáncer de mama fue la enfermedad más frecuente con 15.3 % y la primera causa de muerte en mujeres, con un estimado de 29 mil 929 nuevos casos y siete mil 931 muertes. Por ello es que es necesario incentivar la autoexploración desde temprana edad.
¿Cómo se hace la autoexploración?
El IMSS menciona que lo primero que se debe hacer es observar a través de un espejo las mamas, para buscar cambios en la forma, tamaño o superficie de la piel; especialmente hundimientos, inflación, enrojecimiento o ulceraciones.
Este procedimiento deberás hacerlo con los brazos a los lados, las manos detrás de la cabeza, los codos y hombros ligeramente hacia adelante y con las manos en la cintura. Después, es necesario tocar, ya sea en ese momento viendo al espejo o en el baño y buscar bolitas, zonas dolorosas, abultamientos o consistencia diferente al resto de la mama.
Este examen con tacto deberá hacerse de la siguiente manera:
- De pie: la mano derecha en la nuca, con la izquierda toca el pecho derecho. Se debe comenzar desde arriba palpando alrededor de la mama y luego en la parte del centro. Posteriormente, revisar toda la axila y al final apretar el pezón para ver si hay salida anormal de líquido. Explorar el otro pecho de la misma manera.
- Acostada: con una almohada pequeña o toalla enrollada debajo del hombro derecho, poner la mano derecha en la nuca, con la mano izquierda revisar el pecho derecho, palpar de la misma manera que lo hiciste estando de pie. Haz lo mismo para explorar el seno izquierdo.
La autoexploración se recomienda hacerla siete días después de la menstruación y en caso de no reglar elegir un día fijo al mes, pues lo importante es hacerlo periódicamente y conocer cómo son en cada etapa que se pasa dependiendo del periodo del mes, la edad o de ciertas circunstancias como el embarazo.
Agregan que, aunque la mayoría de los cambios anormales no son causados por cáncer, es importante acudir con el médico para que valore la necesidad de estudios que descarten el padecimiento.