Comunidad celebra a niños dentro del Trastorno del Espectro Autista

Entre risas y juegos, Café Atípico celebró a los pequeños con una convivencia en la que todos estuvieron contentos, demostrando que estas fiestas son posibles.

Café Atípico sigue en busca espacios empáticos, respetuosos y amorosos para los niños. (cortesía)
Torreón, Coahuila /

Para celebrar a los pequeños del hogar, el colectivo Café Atípico, espacio de familias con infancias dentro del Trastorno del Espectro Autista (TEA) hizo una celebración el 1 de mayo para los pequeños que forman parte, de modo que disfruten un día especial adecuado lo más que se pueda a las necesidades de los niños.

Tatiana Bardán Izaguirre, miembro fundador y parte del comité de Organización y Planeación de la comunidad, comenta que esta convivencia fue con alrededor de 250 personas entre padres de familia e infancias, el cual se planificó durante todo el mes de abril, en el que tuvieron regalos, bolos, comida para niños y adultos y demás diversiones para todos ellos.

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“Con este tipo de convivencias, nuestra finalidad principal es que se siga fomentando la comunidad con la que contamos para ser un espacio de apoyo para las familias con un pequeño dentro del TEA”, declara.

¿Cómo se hace una fiesta para ellos?

Igualmente, comenta que hacer eventos así no es una tarea fácil, ya que cada niño es diferente, por lo que elegir la manera en la que se puede hacer una celebración adaptándose a las necesidades de cada uno puede ser complicado, pero se tienen medidas generales que aportan de manera positiva a la convivencia.

“Tratamos de cuidar el no tener música, que en las fiestas no se use el micrófono para no tener contaminación auditiva, cosa que afecta a muchos pequeños dentro del TEA y se pueden desregular, pero en general las familias estuvieron en paz y contentas con esta celebración al Día del Niño”.

Comparte que incluso a uno de los pequeños no le gustan los globos, por lo que fue un poco complicado que se adaptara al inicio al tener en la entrada un arco con ellos, pero al final terminó jugando con uno, lo cual alegró a su familia por haberse atrevido a enfrentar sus miedo y hacer cosas nuevas.

Finaliza que Café Atípico sigue en busca espacios empáticos, respetuosos y amorosos para los niños, lo cual no es una tarea fácil, pero que es posible hacerlos y esperan que con el trabajo que se hace sigan fomentando la inclusión y respeto a todas las personas.

  • Karla Rodríguez
  • Egresada de la licenciatura en Ciencias de la Comunicación por la Universidad La Salle Laguna. Desde 2021 es reportera y editora web de Aula, y colabora en suplementos y notas comerciales. Amante de la música y cantante enfocada en el canto lírico.

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