Ciertamente cuando los niños llegan a ciertas etapas estudiantiles se espera que ellos aprendan en el ciclo escolar lo necesario para pasar al siguiente nivel y poder seguir con sus estudios. Sin embargo, hay aspectos que pueden hacer que este aprendizaje se complique un poco, especialmente la lectura en los más pequeños y es necesario que, primeramente, se observe al menor para detectar algún problema.
Por ello te damos algunas señales que pueden ser útiles para detectar si un niño está pasando por un problema a la hora de aprender a leer, para que así puedas llevarlo con profesionales en la materia que te orienten sobre lo que pueda estar pasando con el pequeño.
Tener un conocimiento limitado del nombre y sonido de las letras
Esto puede traducirse a un síntoma de dislexia, pero también puede pasar cuando un niño no se le ha dado suficiente exposición a libros o se ha sido negligente en enseñarle sobre la fonética. Es necesario entonces que los padres analicen su contacto con la lectura y, en caso de que esto no sea el problema, canalizarlo con un profesional para conocer si hay otro factor.
“No me gusta leer”
Regularmente los niños que dicen esta frase son los mismos que nunca se ofrecen de voluntarios o que se molestan cuando se les pide su participación. No hay que tomarse literal esta frase. Siempre hay que preguntar por qué. Lo más frecuente es que a un niño no le gusta leer porque lo considera demasiado difícil y es donde se le puede ayudar a que comprenda palabras.
Se le dificulta rimar
Cantar canciones infantiles con los niños es muy divertido. Además puede ayudar a revelar qué tan bien entienden el lenguaje. Cuando no parecen reconocer las rimas ni tratan de crearlas, puede ser una señal de alerta. Muchos pequeños que tienen dificultad para hacer rimas, son propensos a tener dificultades con la lectura.
El niño hace sincronización labial en lugar de leer en voz alta
Es importante escuchar a los maestros cuando mencionan su inquietud en cuanto al menor en este aspecto. Si menciona que cuando se les pone a leer solo mueven sus labios para fingir que siguen la lectura, pero al pedir que lean en voz alta no quieren, puede ser una indicación de que necesitan más instrucción en este ámbito.
Tiene dificultad para usar estrategias de lectura o las usa excesivamente
Estrategias como usar pistas proporcionadas por el contexto (como imágenes) ayudan a los estudiantes a aprender a leer. Pero si un niño que se encuentra a mediados de primer grado o más adelante dice o escribe una palabra que no concuerda con la imagen que está en la página, puede que indique que necesita más instrucción en la materia.
Olvida o pronuncia incorrectamente palabras nuevas
Cuando pronuncia incorrectamente palabras nuevas, no puede recordarlas, o ambas es una señal de problemas con la lectura. Los niños pequeños a menudo invierten letras y palabras, o las confunden. Pero si continúan cometiendo esos errores frecuentemente a medida que crece, más enseñanza explícita y práctica puede ayudar.
Nadie le lee al niño en la casa
Los niños se empiezan a interesar en tomar un libro y comprender por sí solos las palabras que se encuentran ahí cuando en casa hay alguien leyéndoles cuentos para dormir. Es importante que los padres tomen ese tiempo como una responsabilidad hacia el niño para que se anime a aprender y conocer el mundo a través de estos relatos.