La seguridad hídrica en México enfrenta cinco grandes retos: escasez, contaminación, conflictos por el agua, deterioro ambiental de cuencas y acuíferos.
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Ante ese panorama, en las cuencas mexicanas habrá escasez para 2030 si sigue creciendo la concentración de la población en los principales centros urbanos, lo que aumentará la sobreexplotación de mantos acuíferos, advirtió el doctor Polioptro Martínez Austria, durante su conferencia en línea ofrecida para la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial, del gobierno de Puebla.
El titular de la Cátedra Unesco-Udlap en Riesgos Hidrometeorológicos indicó que la escasez es propiciada por factores como demografía, producción de alimentos, demanda de energía, cambio climático y carecer de una reforma para administrar el líquido y generar el capital para transportación, saneamiento y potabilización.
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En la ponencia, titulada “La seguridad hídrica de México: retos principales”, afirmó que las tarifas bajas también afectan: “El agua no cuesta, lo que cuesta es sacarla del acuífero, purificarla, hacerla potable y llevar por la red hasta la casa, con todo lo que eso signifique”.
Martínez Austria dijo que México es uno de los países más afectados por el cambio climático.