Leonardo da Vinci, el rock y cemitas, las pasiones del astrónomo Raúl Mujica

Edición Fin de Semana

El investigador del Inaoe rechaza la idea de que los científicos estén todo el día en la oficina, pues para él, lo más importante es pasar tiempo con su familia.

Raúl Mujica García es astrónomo y toda su vida se ha dedicado a la ciencia. (Especial)
Carlos Morales
Puebla /

Proviene de una familia humilde que desde el principio le advirtió que para brillar debía estudiar y ser el mejor, por lo que fácilmente se identifica con valores como el de la responsabilidad y la perseverancia. Su tío, Juan García, fue quien más lo motivó.

Es amante del cielo y las estrellas, pero también un obsesionado de Leonardo Da Vinci, fanático del rock y promotor de las cemitas como el platillo más sabroso hecho en Puebla.

Raúl Mújica García es astrónomo y toda su vida la ha dedicado a la ciencia. Es graduado por la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) y realizó maestría y doctorado en el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (Inaoe), con estancia en Heidelberg, Alemania.

En 2012 fue reconocido con el Premio Estatal de Ciencia en Divulgación Científica, del Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Puebla (Concytep), así como el Premio Nacional de Divulgación Científica del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt); sin embargo, él considera que su mayor regalo es su familia, integrada por Lupita, su esposa, y su hijo, Raúl.

¿Es cierto que los científicos están todo el día en su laboratorio?

“No, de ninguna manera. Sé de algunos casos de colegas que se la viven en su oficina, pero no es mi caso. La gente cree que somos gente que todo el día estamos frente al monitor, haciendo cuentas, descifrando códigos, pero eso no es cierto. Yo digo que todo depende de cómo administres tus tiempos y esa es la clave para hacer otras cosas, sobre todo pasar tiempo con tu familia que para mí es lo más importante”.

¿Qué disfrutas hacer en tu tiempo libre?

“Leer. Me gusta leer mucho y en esta pandemia lo he hecho más. Debo decirlo soy un fanático de Leonardo Da Vinci y tengo todos sus libros biográficos, soy un admirador de él por todo lo que hizo en el arte, como escultor, pero también era arquitecto, tuvo muchos inventos, tengo un libro de él hasta sobre la cocina. Pero también leo novelas, cuentos, cómics y por supuesto, artículos científicos y de divulgación”.

¿Te gusta la ciencia ficción?

“Por supuesto. Yo me acuerdo que a inicios de los 80’s cada sábado veía en la televisión Cosmos de Carl Sagan, un gran divulgador, fue una inspiración importante, no digo que él sea de ciencia ficción aunque sí tiene un par de libros, pero los clásicos son Ray Bradbury e Isaac Asimov”

¿Cuál es tu cuerpo celeste favorito?

“Es una gran pregunta pero sin temor a equivocarme son los objetos Herbig-Haro, normalmente se les llama HH. Son nebulosas asociadas con estrellas recién formadas y crean fenómenos visuales impresionantes, además, su nombre se debe a Guillermo Haro Barraza, científico mexicano, y a George Herbig, que fueron los primeros en estudiarlas”.

¿A los astrónomos les gusta el silencio?

“Pues no sé los demás, pero me encanta escuchar música, yo escucho de todo aunque el rock es mi favorito. Obvio The Beatles pero también Pink Floyd y Led Zeppelin, también hay grupos italianos con ritmos progresivos y la música clasica, Mozart es de mis favoritos”.

¿Cuáles son tus comidas favoritas?

“Soy una persona a la que le gusta cocinar, lo hago mucho en casa y me gusta experimentar, probas cosas nuevas. Eso hago cuando salgo de viaje, probar nuevos sabores, nuevas experiencias.

Pero yo creo que una de mis favoritas son las cemitas. Me encantan las cemitas con todo lo que te imagines que puedan llevar, de milanesa, de pata, la futbolera. Que me perdone el mole poblano, pero yo creo que la cemita es por excelencia el platillo más sabroso que se produce en Puebla”.

¿Tienes algún otro gusto en particular?

“Tengo dos, el mezcal y las máscaras talladas de madera tradicionales. De las máscaras tengo como 70 en mi casa y no me preguntes de dónde salió ese gusto porque ni yo sé, pero tengo de todas, de Los Huehues, de Los Viejitos, de danzas de todo México, tengo dos de Venecia y una de África. Me gusta el carnaval y antes de la pandemia acostumbra a ir con mi familia a ver los bailes y las danzas de las principales cuadrillas del Centro de Puebla. Eso sí, lo de las máscaras es un gusto muy extraño porque requiere de mucha inversión y hay algunas que son muy caras, quisiera tener más pero no alcanza”.

¿Y el mezcal?

“Uf, yo solo me pregunto cómo es que me perdí de esto tanto tiempo porque lo conozco de hace 7-8 años. Es una cosa maravillosa y cuando se debe, lo consumimos. Tú sabes que no es para copear y se bebe en traguitos, así que antes mis colegas de Oaxaca me traían, de vez en cuando me envían alguna bebida”.

¿Qué te falta hacer en tu carrera profesional?

“Me gustaría realizar un programa para que los maestros del país aprendan y enseñen ciencia, pero no para que nosotros les digamos cómo hacer las cosas, sino que ellos experimenten y lo compartan con sus alumnos, y que ellos también nos enseñen para que nosotros aprendamos a difundirlo”.

mpl

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