Las personas detenidas o retenidas en la Fiscalía de Justicia deberán contar con certificado médico y cambiar su cubrebocas cada 24 horas; mientras que los cadáveres de casos sospechosos, posibles o confirmados con covid-19, no podrán ir a fosas comunes ni ser objeto de necropsia, señalan acuerdos de esta instancia.
Se habilitará el Centro de Resguardo de Cadáveres para que, de ser necesario, se remitan a este lugar los cuerpos de desconocida o identificados, pero no reclamados que sean sospechosos o confirmados con SAR-CoV2, quienes irán a fosas específicas, donde claramente se indique que se trata de una defunción por este virus.
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En estos casos no se realizará la necropsia, aún cuando existan datos de la posible comisión de un hecho considerado como delito porque se puede poner en riesgo la salud pública o del personal, por lo cual es obligatorio usar cubrebocas y cambiarlo cada 24 horas o utilizar equipo de bioseguridad.
Además, debe crear un Centro de Atención Integral para Personal de la Fiscalía para brindar apoyo y asesoría a los servidores en torno al virus, con el fin de canalizar a los casos sospechosos a las instituciones de salud.
De acuerdo con el documentado por el fiscal Alejandro Jaime Gómez Sánchez, los detenidos deben portar cubrebocas y reemplazarlo cada 24 horas y se deben desinfectar todos los espacios de manera constante
Se recibirán denuncias de manera presencial solo cuando se trate de asuntos con detenidos, en los demás casos se debe hacer a través de los medios alternativos como es el Centro de Atención Telefónica, internet, la aplicación móvil o por correo electrónico sin ser necesario ratificar la denuncia.
De acuerdo a la guía operativa y reglas que emitió el área de Servicios Periciales de la Fiscalía General de Justicia, signada por su director, Cuauhtémoc José Zariñana Oronoz, se deben distinguir entre casos sospechosos, probables y confirmados, además habrá tratamiento especial para los cadáveres de vía pública, de hospitales y muertes violentas.
Asimismo es obligatorio que se use el mínimo de personal, que acudan con equipo de bioseguirdad, con cabina separada del cadáver, el cual deberá estar en bolsa debidamente sellada y la camilla se deberá lavar con agua y jabón y limpiarse con solución clorada luego de cada procedimiento.
Mientras que los cuerpos no deberán lavarse. No se puede intercambiar utensilios en cada intervención, se prohíbe comer en el área de manejo; si son de identidad desconocida se tomarán las muestras; las ropas y objetos de sospechosos, probables o confirmados se embalarán, etiquetarán y sellarán para enviar a la bodega de evidencias, sin poder abrir en 15 días y perfectamente identificados, una vez en la bodega habrá un espacio específico para este tipo de resguardos.
Debe haber una eliminación segura de los residuos generados en el proceso y manejo de cuerpos, se prohíbe la entrada de personal ajeno y al terminar una intervención deberán cambiarse y poner la ropa en una bolsa para su lavado.
MMCF