El confinamiento por la pandemia del covid-19 ha provocado estrés, ansiedad, depresión y, sobre todo, dificultad para dormir. Descansar bien es tan importante como una buena alimentación.
Tanto a nivel físico como psicológico, dormir mal tiene consecuencias negativas, además de que favorece el desarrollo de enfermedades.
En entrevista, el doctor Ulises Jiménez, responsable de la Clínica de Trastornos del Sueño de la UNAM, explicó que las personas han dejado de dormir por las medidas del distanciamiento social, ya que “hemos perdido la necesidad de levantarnos para ir al trabajo y a la escuela”.
Otra razón, señaló, es la carga de información sobre la pandemia, además de que pasamos mucho tiempo en redes sociales. En ese sentido, las personas que han perdido el contacto social son más vulnerables, ya que desarrollan ansiedad.
Y aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha registrado la existencia de más de 80 tipos de trastornos del sueño, el más común es el insomnio. Por eso el doctor Jiménez aconsejó planear actividades que distraigan la mente durante el día.
“Hacer mucho ejercicio ayuda, aparte de que beneficia al cuerpo, es una buena distracción; alimentarte sanamente es primordial, le damos los nutrientes necesarios al cuerpo y actividades en familia”. Sugirió evitar las bebidas con cafeína o energéticos.
A los que toman medicamentos para dormir les recomendó ver a “su especialista de cabecera, pues se ha reportado que se están consumiendo más dosis de las indicadas, lo que puede ser peligroso para la salud”.
Para recuperar la capacidad satisfactoria del sueño llamó a mantener un horario, muy cercano al de antes del confinamiento, y no dormir en el día o solo una siesta corta de menos de una hora.
Si sufres falta de sueño, puedes consultar la página http://clinicadelsueño.facmed.unam.mx/ y agendar cita con especialistas.
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