Tras la apertura por parte del gobierno federal para que empresarios, gobiernos estatales y municipales puedan adquirir la vacuna contra el covid-19, el sector educativo privado en el Estado de México también está interesado en comprar dosis para sus profesores y personal administrativo.
De acuerdo con el presidente de la Asociación de Escuelas Particulares del Estado de México, José Manuel Díaz Orozco, solo en los colegios incorporados a la Secretaría de Educación Pública (SEP) serían necesarias al menos 20 mil vacunas. Recordó que el Estado de México es la entidad federativa con mayor número de planteles escolares privados en nivel básico, al sumar 5 mil 590, en los que laboran 54 mil 595 docentes.
Si bien los maestros en estos momentos no están en las aulas físicamente, también pueden considerarse dentro del sector primordial, especialmente, los de nivel básico (preescolar, primaria y secundaria), ya que son los estudiantes más pequeños los que requieren mayor atención para que los padres puedan acudir a realizar sus actividades sin preocupaciones.
“El principal obstáculo que han enfrentado los padres en esta pandemia es donde dejar a los pequeños menores de 12 años, quienes en muchos casos no se valen por sí mismos. Cuando ellos tienen que salir a trabajar o a realizar sus actividades no tienen con quien dejarlos o bien se han ido terminando los permisos especiales, por ello es importante estar listos para cuando ya se puedan abrir las instituciones”.
Al igual que otros sectores, afirmó, están dispuestos a invertir en la salud de su personal para que se vea reflejado en un menor número de contagios, pues si bien los alumnos no están en las aulas por el riesgo que implica salir a la calle, en algunos casos se han visto vulnerados por sus propias familias o conocidos.
“Es importante que las autoridades nos permitan comprar las vacunas y claro que estamos interesados, haremos los trámites necesarios para adquirirlas y si es posible, empezar a abrir los niveles básicos, toda vez que la matricula sigue a la baja”.
Díaz Orozco recordó que cerraron 2020 sin apoyos y la matrícula de alumnos bajó por lo menos 50 por ciento, lo que provocó que decenas de colegios de todos los niveles hayan suspendido actividades. Pese a no brindar servicios en las aulas si están pagando, predial, luz, agua, internet, nóminas y demás insumos, los cuales se han visto afectados por la reducción en los ingresos.
“Lamentablemente, hoy muchos papás no tienen dinero para seguir pagando colegiaturas, ya sea porque se acabaron sus ahorros o aguinaldos o ya no tienen trabajo”.
Este año, dijo, lo vislumbran complicado porque la pandemia por covid-19 sigue trayendo consigo problemas de desempleo y los números no les alcanzan para recontratar al personal que tuvieron que descansar, principalmente, gente de aseo y mantenimiento, por lo que algunas escuelas están trabajando con 70 por ciento de su personal.
MMCF