Ponen en práctica primer tratamiento a distancia para adicciones en México

Este tratamiento tiene una eficiencia que rebasa el 80% en recuperaciones y permite a las personas con algún tipo de adicción conservar su trabajo y actividades cotidianas mientras atienden su problema.

Reyna Khabie Romano, directora general del instituto. (Especial)
Alejandra Zárate
Ciudad de México /

Derivado del confinamiento por la pandemia, el tratamiento para adicciones se torna difícil; si bien algunos centros de recuperación consideran indispensable el internamiento para desintoxicar al consumidor, existe otra alternativa para atender a distancia las enfermedades biopsicosociales.

Luego de la situación que se vive por la pandemia, Emotions Life Center diseñó el primer tratamiento a distancia en México para quienes padecen algún tipo de adicción, permitiéndoles conservar su empleo y llevar a cabo otras actividades cotidianas. Este método facilita la integración para la recuperación a la vida de la persona, sin tener que aislarla por completo.

Muchas veces una adicción es la punta del iceberg, “la recuperación empieza cuando sales de la clínica de internamiento, porque regresas a tu entorno, a la familia, a los amigos, al trabajo, a los problemas que dejaste antes de que te tuvieran que internar”, comenta Reyna Khabie Romano, directora general del instituto.

Canalizar las emociones de forma correcta es lo principal, afirmó Reyna en entrevista para MILENIO. 

“Prácticamente, lo que hacemos es ir acompañando al paciente para que sea una mejor versión de sí mismo y que vaya arreglando los diferentes ámbitos de su vida”, dijo. 

El centro brinda atención fisiológica, psiquiátrica y psicológica para que el sujeto identifique la gama de emociones que experimenta a raíz de la abstinencia. Afirma Reyna que “para un autocontrol, tiene que haber un autoconocimiento”. La familia también recibe atención como parte del tratamiento de integración social.

A diario las personas que reciben el tratamiento, dedican hora y media de su tiempo a las sesiones de consejería y terapia, cual si fueran al gimnasio o alguna actividad recreativa. El resto es libre para llevar a cabo su rutina. De acuerdo con los datos proporcionados por la clínica, este tratamiento alcanza un 82 por ciento de efectividad.

“Hace siete años era yo la que estaba pidiendo ayuda, me tuvieron que internar en una clínica residencial y a raíz de eso yo dije, si esto me pasó a mí, voy a buscar la forma para ayudar a más personas”, destacó la vocera.

ledz

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