De las casi 200 vacunas que están en pruebas en todo el mundo, seis ya se encuentran con ensayos en miles de personas dentro de la fase tres; pese a ello, “es imposible que este año alguna de ellas se distribuya entre la población de cualquier país, porque aún se deben cubrir requisitos sanitarios, el proceso regulatorio, de producción, almacenaje y distribución”.
En entrevista con MILENIO, Roselyn Lemus, doctora en Biología Molecular de la Universidad de Oxford e integrante del equipo de científicos involucrados en el desarrollo de la vacuna y tratamientos anti covid-19 fue enfática al señalar:
“Es imposible que este año esté en el mercado una vacuna. Posiblemente los primeros meses del 2021 se puedan tener las primeras dosis si se aceleran los procesos como es el caso de la producción”.
La búsqueda de una vacuna contra el coronavirus SARS-COV-2- se encuentra en diferentes etapas: seis en fase tres; 140 en la fase preclínica, 12 en fase dos, 18 en fase uno y una en aprobación para uso emergente.
En México se sabe de cuatro desarrollos, pero desafortunadamente están en espera de financiamiento para ver si avanzan con el proceso, comentó la doctora Lemus.
Explicó que mucho se ha dicho que la vacuna estará lista en septiembre u octubre, pero aclaró: “En esos meses vamos a saber si los resultados de la fase tres fueron positivos y lo digo de manera fría para no desinformar, porque incluso Marcelo Ebrard dijo que vamos a tener la vacuna este año, pero no ha presentado un plan para decir cómo se va a tener en México”.
Además, consideró que una vez aprobada la vacuna, la distribución no será equitativa, ya que los primeros que la tendrán son las naciones ricas, como Estados Unidos que ya apartó 100 millones de dosis e Inglaterra que ya tiene compradas 90 millones de unidades, los países en desarrollo, como México, “podríamos decir que estamos en lista de espera¨.
“Obvio las naciones ricas van a tener primero acceso a la vacuna y la OMS no se ha pronunciado al respecto; no sabemos cómo va a llegar a México, pero ya se está hablando que la vacuna que sea y el país que la tenga, se atenderá primero a los grupos de riesgo: mayores de 60 años y trabajadores del sector salud que están en contacto con pacientes covid…en una primera edición y después se hará la distribución generalizada”, dijo.
Al respecto, mencionó que se buscan alianzas con la mayoría de farmacéuticas, porque se requieren por lo menos cinco grandes productoras de vacunas para poder abastecer a la mayoría de la población mundial.
A decir de la también experta en Diseño de Nuevos Fármacos, para poder regresar a la normalidad se necesitará que más del 70 por ciento de la población mundial esté vacunada, lo cual depende sobre todo de lograr una gran producción.
En el caso de México consideró que el problema persistirá en el 2021, porque en una primera fase de producción y distribución quizá se logra vacunar solamente a un porcentaje de la población, “el covid-19 es algo que en el mundo ya llegó para quedarse y tendremos que aprender a convivir con ello”.
En este sentido, dijo que hasta el momento no se sabe cuál es el período de protección de la vacuna una vez que se abra a la población, pueden ser dos meses, cuatro meses o un año, “ayudará para llevar una vida normal, pero la protección a largo plazo se desconoce, lo que implica que, como con la influenza, nos tendremos que estar vacunando cada año “
Sobre el particular, consideró que se debe abrir una fase cuatro de la vacuna para estudiar su inmunidad a largo plazo, porque estamos ante un virus que está mutando y por ello la importancia de tener, además de la vacuna, un tratamiento
A este respecto, recordó que Oxford y otras iniciativas internacionales trabajan en la elaboración de posibles tratamientos para combatir el coronavirus SARS-COV-2.
“Si queremos diseñar un medicamento nuevo, nos vamos a tardar varios años, de ahí que también estamos probando con tratamientos existentes como el remdesivir o la dexametasona que han dado buenos resultados pero solo en casos graves y se sigue probando con otros productos químicos o naturales, "se analiza todo lo que se pueda imaginar”.
Finalmente, la experta dejó también en claro que combatir el mortal virus es un tema científico y nadie está a salvo de infectarse; “la inmunidad no es algo de moral o porque soy buena persona, nos puede dar a todos, incluso a los jefes de las naciones”.
ledz