Científicos presentan nueva teoría sobre el origen del agua en la Tierra

De acuerdo con investigadores franceses y estadunidenses, los meteoritos de enstatita que chocaron en la proto-Tierra pudieron haber producido más hidrógeno para que formase los océanos millones de años más tarde.

En una imagen del planeta Tierra sobresale el huracán Willa en Mexico. (@ChaacTlaloc)
AFP
Washington D.C. / Madrid /

Según un estudio publicado por la revista Science apuntaría que un tipo de meteorito, los condritas de enstatita, pudieron proporcionar a la proto-Tierra, al menos, tres veces la masa de agua de sus océanos, que actualmente cubren el 70 por ciento de la superficie de la tierra y crucial para la vida del planeta. 

El añejo acertijo se acercó a su resolución tras el anuncio de un equipo de científicos franceses y estadunidenses diciendo que lograron identificar las rocas espaciales formadas en el interior del Sistema Solar y que sería uno de los bloques con los que se empezó a formar nuestro planeta el agua.

La cosmoquímica Laurette Piani, que lideró la investigación, dijo que, al contrario de teorías prevalecientes, el agua del planeta podría haber estado contenida en sus bloques esenciales. Los investigadores analizaron algunos meteoritos de enstatita, los cuales son muy escasos y de los que se había asumido que eran demasiado secos para proporcionar agua al Tierra, pues se formaron cerca del Sol, donde el hielo no podía sobrevivir.

Se midió el contenido de hidrógeno y la relación deuterio e hidrógeno en trece meteoritos y hallaron que estos albergan mucho más hidrógeno del que se suponía. Los autores estiman que los materiales similares a la enstatita que se fusionaron durante la formación temprana del planeta "podrían haber suministrado suficiente hidrógeno a la proto-Tierra en crecimiento para proporcionar al menos tres veces la cantidad de agua en los océanos actuales".

Esto podría explicar las condiciones de esterilidad de Mercurio, Venus y Marte, pero no del planeta azul, con sus vastos océanos, una atmósfera húmeda y su geología bien hidratada.

La relación de deuterio e hidrógeno y las composiciones de isótopos de nitrógeno de las enstatita analizadas "se alinean estrechamente con las del manto de la Tierra", apoyando las afirmaciones de que los orígenes del agua está dentro de las rocas a partir de las cuales se construyó el planeta, señala la revista.

El material portador de hidrógeno "estaba presente en el Sistema Solar interno en el momento de la formación del planeta rocoso, aunque las temperaturas eran demasiado altas para que el agua se condensara".

Otro de los autores de la investigación, Lionel Vacher, destacó que para él, lo más interesante del descubrimiento "es que las condritas de enstatita, que se creía que estaban casi 'secas', contienen una alta abundancia de agua inesperada".

"Si las condritas de enstatita fueran efectivamente los bloques de construcción de nuestro planeta, como se sugiere fuertemente por sus composiciones isotópicas similares, este resultado implica que estos tipos de condritas suministraron suficiente agua a la Tierra" para explicar su origen del agua, "lo cual es asombroso", agregó.

La idea más frecuente es que el agua apareció en una etapa posterior, traída por un objeto extraterrestre, y entre ellos los principales sospechosos son los meteoritos que poseen agua en abundancia, conocidos como condritas carbonáceas. El problema, sin embargo, era que su composición química no coincide plenamente con la de las rocas de la Tierra.

Para probar si esa presunción era cierta, Piani y sus colegas de la Universidad de Lorraine utilizaron una técnica de medición llamada espectrometría de masas para cuantificar el contenido de hidrógeno en 13 condritas de enstatita.

Encontraron que las rocas contenían suficiente hidrógeno en su interior como para proveer a la Tierra con al menos tres veces la masa de agua de sus océanos. También midieron los dos tipos de hidrógeno, conocidos como isótopos, porque la proporción relativa de estos es muy diferente entre distintos cuerpos del Sistema Solar.

La investigación de su equipo no excluye que más agua haya llegado luego de otras fuentes como cometas, pero el trabajo indica que las condritas de enstatita realizaron un aporte significativo a la cantidad de agua de la Tierra en su etapa de formación.

El hallazgo de los científicos "aporta un elemento crucial y elegante a este rompecabezas", escribió Anne Peslier, científica planetaria de la NASA, en una editorial que acompaña la publicación. El estudio también propone que una gran cantidad del nitrógeno atmosférico, el componente más abundante de la atmósfera de la Tierra, podría haber venido igualmente de las enstatita.

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