Antes de la pandemia en el país una de cada cuatro personas padecía algún trastorno mental -depresión, ansiedad o consumo de sustancias- mientras en el entorno laboral eran uno de cada cinco trabajadores. De acuerdo con los médicos ocupacionales, tras la crisis del Covid-19 ha habido un incremento del 40 por ciento en los casos, es decir, están sobrepasados con la gente que están atendiendo y muchos de los trastornos tienen que ver con afecciones físicas como el dolor de cabeza, insomnio, dolor de estómago, dolor esquelético, entre otros.
"Las personas van por un problema de salud física, pero en realidad no saben que tienen un problema mental detrás de esas manifestaciones y los médicos ocupacionales lo que hacen es darles medicamentos para los síntomas físicos, pero se siguen sintiendo mal. Ante esto empiezan a considerar que las personas tienen depresión o ansiedad", detalla Humberto Guerrero Manning, socio director de ADN Wellbeing, firma especializada en la atención de salud mental en el trabajo y la gestión de los factores psicosociales.
Hoy en las grandes empresas hay mayor conciencia del bienestar de los trabajadores porque saben que invertir en salud mental genera mayores rendimientos, calidad de vida, salud emocional, productividad y rentabilidad. Además de reducir los costos del ausentismo, la rotación de personal, la prima del seguro social y la tasa de incidentes.
“Lamentablemente todavía no hay conciencia de que invertir en salud, bienestar y salud mental en el trabajo tiene un efecto en las finanzas del negocio. Desafortunadamente el tema en México es un tabú y está muy estigmatizado, lo que debemos hacer es visibilizar el problema y empezar a hablar de la importancia de la salud mental en general y el trabajo”.
Las condiciones de salud mental son una pandemia silenciosa que nos van a acompañar por muchos años después de lo que vivimos. En 2020 nos enfrentamos a una crisis social, económica, de salud y de duelo por las pérdidas humanas, es una bola de nieve enorme que no se ha visibilizando del todo y sigue pesando a los trabajadores en general.
No piden ayuda
De acuerdo con los primeros resultados de la encuesta que ADN Wellbeing aplicó en junio de este año en el Estado de México, la Ciudad de México, Hidalgo, Morelos, Michoacán, Chihuahua, Guanajuato y se mantiene en las entidades con mayores índices; a la fecha muchas organizaciones tienen servicios de atención, donde los trabajadores pueden solicitar apoyo psicológico, sin embargo, no lo están usando.
“Es difícil que una persona se auto diagnostique y determine que está deprimido, ansioso o necesita ayuda, quien realmente puede hacerlo es el servicio médico”.
Aunque siempre es necesaria la atención metal o psicológica, en la mayoría de los casos se requiere atención psiquiátrica para ofertar un tratamiento integral, lo cual ya contempla la Ley Federal del Trabajo en la Norma-037.
Las empresas están obligadas a identificar a los trabajadores que están padeciendo algún trastorno mental, los cuales ya se consideran en la actualización de la Tabla de Enfermedades, es decir, tienen la obligación de identificar, evaluar y canalizar a los trabajadores para su atención.
Identificar los factores
Hoy hay empleos donde existe una gran demanda emocional o una gran demanda cognitiva y exponen al trabajador a un riesgo muy alto. Actualmente, la sobrecarga de trabajo, es una de las principales causas de exposición a un factor de riesgo psicosocial que puede derivar en una enfermedad de trabajo como el estrés que funge como un catalizador.
“Esto se considera en la Norma-035 y la actualización de la tabla de enfermedades, por lo que dependerá mucho de la frecuencia con la que las personas se exponen al factor de riesgo, la intensidad y el tiempo que se expusieron”.
Por ello, las empresas deben cumplir con lo que pide el marco normativo mexicano e identificar las áreas o puestos donde haya exposición al factor de riesgo psicosocial, idóneamente de forma anónima. Muchas empresas creen que aplicando las guías de referencia de la Norma 035 identificarán a la persona que tiene un problema y no es así, pues lo único que identifican es el factor psicosocial.
“Una vez que se identifica lo que se debe hacer es evaluar a las personas, pero psiquiátricamente, para determinar si desarrollaron una enfermedad de trabajo y canalizarlas para su atención en el seguro social, con el equipo interno de la empresa, aunque la mayoría de los equipos de salud ocupacional no tienen capacitación ni herramientas en salud mental, por ello hay que contratar a un equipo especializado integrado por psiquiatras y psicólogos, aunado al contexto de la medicina laboral y de la gestión psicosocial”.
Empresas no se preocupan por trabajadores
Hoy en día la mayoría de las empresas están conscientes de la relevancia de cuidar el bienestar de sus colaboradores, no solo a raíz de la entrada en vigor de la NOM-35 de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) en octubre de 2019, que busca identificar, analizar y prevenir los factores de riesgo psicosociales en los trabajadores, sino tras lo experimentado durante la pandemia por Covid-19.
De acuerdo con la encuesta semanal “Termómetro Laboral”, de OCCMundial, Centro de Carrera Profesional en línea, para 52 por ciento de los trabajadores su empresa nunca se ha preocupado por su bienestar físico y mental ni durante la pandemia ni ahora, mientras 35 por ciento dijo que su empresa continúa ofreciéndoles programas de bienestar y 13 por ciento aseguró que este tipo de estrategias han disminuido.
Para 5 de cada 10 trabajadores los vales de despensa y comida, se ubican entre los principales incentivos que reciben para mantenerlos motivados, mientras 22 por ciento preferiría obtener descuentos por convenios, a 16 por ciento le gustaría recibir apoyo en actividades recreativas y culturales y 12 por ciento prefiere otras opciones como home office, planes de carrera, fondo de ahorro, etcétera.
“Los beneficios dirigidos a la salud mental son necesarios en el contexto actual tras el largo periodo de pandemia, por lo que los programas para buscar la paz mental y reducir el estrés de los colaboradores son indispensables”, señaló Sergio Porragas, director de Operaciones (COO) de OCCMundial
MMCF