Trece mil migrantes se encuentran en la zona norte de Tamaulipas en espera de poder cruzar hacia los Estados Unidos, sin embargo su sueño se vio truncado con el cierre de la frontera sur ordenado por el presidente Donald Trump, como medida preventiva para evitar más contagios de coronavirus.
Francisco Javier García Cabeza de Vaca, gobernador de la entidad tamaulipeca, dijo que al no existir un lugar donde se puedan concentrar de manera ordenada y con todos los servicios básicos se incrementa el riesgo de contagio del covid-19.
"Hemos pedido respetuosamente pero con mucha firmeza a la federación que atienda los compromisos pactados que hicimos con el titular del Instituto Nacional de Migración, con quien desde el pasado mes de julio se definió un sitio de concentración exclusivamente para los migrantes, donde se les brinde los servicios básicos, darles un trato humanitario y buscar protegerlos a ellos y muy especialmente los tamaulipecos de eventuales problemas de salud como el que hoy todos estamos expuestos, el coronavirus".
El ejecutivo estatal manifestó que ya se hizo el planteamiento de manera formal ante las autoridades federales, en espera de tener una respuesta para brindarles a las familias un lugar seguro donde pasar los días en lo que se abren nuevamente el paso de la frontera.
"De la federación esperamos una respuesta oportuna ya que por los conductos oficiales hemos hecho nuestra petición formal, ante la emergencia sanitaria que enfrentamos como país Unidos sigamos trabajando para detener la propagación del coronavirus" finalizó Cabeza de Vaca.