Hermanos mexicanos conquistan Noruega con receta original hecha con bacalao

La gastronomía mexicana demuestra una vez más que se pueden crear platillos novedosos con auténtico bacalao noruego

Tromso, corazón del bacalao, también es ideal para contemplar auroras boreales, disfrutar de la gastronomía ártica y maravillarse con sus paisajes.
Jennifer Moreno Corona
Noruega /

Martín Rodríguez y su hermano Marco se inspiraron en una antigua receta de sus abuelitos para preparar un original platillo hecho a base de bacalao, que los llevó al otro lado del mundo a disfrutar de la naturaleza y gastronomía del Norte de Noruega, pues resultaron ganadores del concurso “Bacalao Noruego, Tradición con Corazón”, que organizó The Norwegian Seafood Council en alianza con Grupo Milenio.

Después de un año de la realización del concurso y de ser anunciados los ganadores, Martín y Marco partieron al Viejo Continente, para vivir una experiencia llena de sabores y entrañables paisajes, ya que uno de los objetivos principales del certamen era conocer el proceso del auténtico bacalao noruego.

Los hermanos dejaron la Ciudad de México con destino a Tromso, Noruega, conocida como la capital del ártico; este sitio también se caracteriza por sus mágicas auroras boreales, su amplia oferta de productos del ártico y, obviamente, por ser el generador de una experiencia inigualable localizada entre mar y montañas únicas.

Gastronomía ártica

Día 1:

En su primer día, los hermanos visitaron el restaurante Mathallen, donde los recibió Gunnar Jensen, chef y fundador del lugar. En esa ocasión, Martín y Marco compartieron la cocina con reconocidos creadores de sabor de Noruega, Portugal y México. Ana Casanova, chef mexicana, los deleitó con un platillo de bacalao con mole, fusionando los sabores y productos de México y Noruega en un armonioso festín.

Los hermanos mexicanos por su parte, demostraron por qué habían sido los indiscutibles ganadores del certamen: prepararon su ensalada de bacalao con pepino y melón, una receta familiar que crearon sus abuelos, compartiendo su original platillo con el resto del mundo.

Martín y Marco compartiendo sus tradiciones en Mathallen. (Jennifer Moreno)

Productos sostenibles de mar

Luego de degustar una gran variedad de platillos, la jornada continuó en las instalaciones del The Norwegian Seafood Council, organización que trabaja junto con la industria pesquera noruega para aumentar el valor de los productos del mar.

Aquí se les recibió con una charla sobre la importancia y la necesidad de ampliar el consumo de productos frescos, pues entre sus principales objetivos es seguir desarrollando prácticas de acuicultura sostenible, promover la pesca de captura silvestre responsable y asegurarse de que los consumidores puedan tomar decisiones conscientes e informadas sobre los alimentos que consumen.

Platillos preparados por reconocidos chefs de Noruega, Portugal y México. (Jennifer Moreno)

Paseo por las montañas

El recorrido prosiguió hacia las montañas; antes de llegar, pasaron a lado de la Catedral Ártica, conocida formalmente como Iglesia Tromsdalen, icónica de la ciudad, por su fachada de forma triangular, que simboliza la naturaleza del Ártico, obra del arquitecto noruego Jan Inge Hovig, terminada de construir en 1965; atravesaron algunas calles de lo que se considera un típico barrio noruego en Alesund y a los pies de la montaña Aksla tomaron un teleférico que los dirigió a la cima, que ofrece una extraordinaria vista; ahí se preparó una deliciosa cena en el restaurante emblemático Fjellstua. De esta manera se culminó el primer día de la travesía.

Vista panorámica desde el restaurante de Fjellstua. (Jennifer Moreno)

A bordo del barco Hermes II

Día 2:

Atraídos por la brisa fresca que desvela olores de mar desde el fiordo, a orillas de Tromso, Martín y Marco junto con la comitiva se dirigieron hacia el barco Hermes II, un histórico buque centenario que data de 1917, para vivir la experiencia de pescar y hacer realidad el sueño de conocer los fiordos noruegos: impresionantes valles en forma de U creados por la acción erosionadora de un glaciar e inundados por las aguas del mar.

Barco Hermes II. (Jennifer Moreno)
Martín y Marco a bordo de Hermes II. (Jennifer Moreno)

Un bello rincón de la isla de Senja

Continuaron reconociendo tierras noruegas en Hamn, un lugar pictórico situado en un antiguo pueblo de pescadores de la década de 1880, donde disfrutaron de la tranquilidad y la paz que ofrece la peculiar isla con las mejores vistas para observar las auroras boreales.

La combinación de mar, montañas y glaciares, caracterizan los espectaculares paisajes de Noruega. (Jennifer Moreno)
Aurora Boreal desde Hamn. (Cortesía)

Idílica playa de Ersfjord

Día 3:

Ya descansados y en el último día de viaje, su primera parada fue la playa Ersfjord, uno de los destinos que no pueden faltar al visitar Senja. Se encuentra al final de uno de los fiordos más bonitos que se pueden visitar en esta zona del norte de Noruega, rodeado de hermosas y esplendidas montañas que se pintan de blanco a finales del otoño y durante el invierno, con apacibles olas que reflejan el ambiente característico del polar ártico.

Playa Ersfjord. (Jennifer Moreno)

El sabor más fresco de la costa

Su última parada fue Husoy, una maravillosa isla en medio de los fiordos, que cuenta con una población de apenas 300 habitantes, quienes se dedican a la pesca. A pesar de su pequeño tamaño, la población tiene todo lo necesario para disfrutar de una gran calidad de vida: desde supermercado hasta escuela de educación primaria y secundaria para formar a los más pequeños de la región.

Isla de Husoy. (Jennifer Moreno)

También se encuentra la fábrica BR. Karlsen, compañía familiar de cría y pesca silvestre totalmente integrada, que puede brindar la mayoría de los recursos que el mar Barents tiene para ofrecer.

Este puerto sirve como centro de actividad y desempeña un papel vital en el sustento de la comunidad local. La historia del pueblo está entrelazada con el mar y la pesca; es una parte importante de la economía y la cultura local. Interactuar con los lugareños y aprender sobre su conexión profundamente arraigada con el océano ofrece un amplio panorama sobre el patrimonio y las tradiciones de la isla.

Conociendo el proceso del bacalao en BR. Karlsen. (Cortesía)

Cena de despedida

Esta travesía de Martín y Marco concluyó con una cena de destilación del ingrediente estrella: el bacalao noruego y un brindis con Aquavit, bebida tradicional a base de patata, con sabor a comino y otras especias como el anís, semillas de hinojo, cilantro o eneldo; licor que se envejece en barricas de roble, usados previamente para jerez.

The Norwegian Seafood Council se mostró comprometido con la difusión de los productos del mar y enriquecer la gastronomía y sabores del mundo desde las distintas formas de su preparación y la versatilidad de su consumo.

Martín y Marco brindando por la diversidad gastronómica de México y Noruega. (Cortesía)

Finalmente, como parte de las actividades más importantes que pudimos conocer en Tromso, fue el proceso de pesca y producción del bacalao noruego. No te pierdas la segunda entrega de esta historia en Milenio.com






RRR

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.