Un tributo a Gustavo Mollajoli a través de “A Buenos Aires”, una pieza nueva de Thiago Soares con “Brusco”, un ejemplo de ballet clásico con “Suite Paquita”, además de la potencia y majestuosidad de “El Corsario”, es lo que tiene preparado el Ballet de Monterrey para ofrecer al público en su Gala de Verano.
Misma que saltará a escena a partir del 22 de junio en el Show Center, según explicó el director de la compañía, el bailarín y coreógrafo brasileño Thiago Soares.
“Estamos en un momento muy padre, porque vamos a tener una temporada que llamamos Verano de Ballet, que es un programa mixto, con una nueva ‘Paquita’, que es un ballet muy clásico y con obras muy bonitas.
“Por primera vez se va a ver aquí en Monterrey ‘A Buenos Aires’, que fue hecha por el gran Gustavo Mollajoli, gran maestro y coreógrafo que ya no está más con nosotros; y hay el estreno de una obra mía ‘Brusco’, con música de Caleb Ruiz”, comentó.
En cuanto “A Buenos Aires”, comentó, es una obra que él bailó, que está ambientada en esa ciudad argentina y que mezcla la técnica clásica con un toque moderno.
Sobre “Brusco”, añadió el artista, es una pieza con el lenguaje del clásico tradicional, pero con los sentimientos del mundo moderno.
“Con gente que se pone más triste, más melancólica, más sensual, más de estado de modo de pelea, es la perfección del clásico con las imperfecciones nuestras de todos los días.
“Entonces es un contraste muy bueno y es una obra que la verdad, en mi opinión, es muy buena para que el público vea al Ballet de Monterrey hacer algo diferente”, señaló.
Con respecto a “El Corsario”, destacó, es un ballet clásico muy fuerte donde participa toda la compañía; mientras que sobre “Suite Paquita” recalcó que es “un ballet tradicional súper clásico”.
El coreógrafo recalcó que la clave del éxito en el Ballet de Monterrey es la comunicación.
El Ballet de Monterrey, dijo Thiago Soares, está en un lugar y un nivel de crear su repertorio y crear nuevas historias, y a nivel personal, añadió, está cada vez más involucrado en la creación.
Mientras que una base importante para que se esté dando este crecimiento en la compañía representativa del estado, reconoció, es la comunicación y coordinación con el Patronato y su presidenta Yolanda Garza.
“Gracias a Dios estamos en un nivel técnico y profesional muy bonito, muy contento, y más que con el apoyo de Yolanda Garza, que es la presidenta del Patronato, pusimos un pequeño departamento de fisioterapia para los bailarines.
“La verdad vamos avanzando, vamos haciendo progreso, mejorando, y siento que la comunicación con Yolanda es algo fundamental para crear sinergia y poder avanzar y mejorar.
“Muy contento por tener esa comunicación constante con ella y el Patronato, es un equipo y un trabajo que uno solo no lo puede hacer, me siento en un lugar bastante positivo”, puntualizó.
Por último, sobre lo realizado en el primer semestre del año, enfatizó lo que se hizo con el programa Work in progress.
Un programa para ejercitar nuevos coreógrafos y dar oportunidad a bailarines, y dar más difusión de cómo y por qué se crea una obra, así como la puesta en escena de Peter Pan, y presentaciones en ciudades como Torreón, o en León haciendo repertorio de la compañía.
“El Ballet de Monterrey es una compañía viva artísticamente porque hacemos de todo y vamos en progreso”, remató.