La tradicional "María" se suma a los festejos del Día de Muertos vestida de Catrina gracias a la mano artesanal de Margarita Macías Hernández, quien desde niña aprendió a elaborarlas en su pueblo natal Santiago Mexquititlán, Querétaro, de donde es originaria esta muñeca.
Por mucho tiempo replicó el molde clásico, primero como juguete y luego para mantener vivo el legado de su familia; sin embargo, desde hace 3 años implementó un nuevo diseño que conmemora las festividades de la temporada.
- “Aprendí por parte de mi mamá y mi abuela, cuando éramos niñas no teníamos con qué jugar entonces aprendimos a hacerlas con trapos, después las hicimos para venderlas por la necesidad y la falta de economía”.
Confección
En la mesa de trabajo de Margarita hay tela, listones e hilos de colores que corta, cose, rellena y borda para darle forma a las "Marías", muñecas que exigen dedicación y atención.
“Ahora ya tenemos una máquina de coser, pero muchas cosas son a mano como el bordado de los ojos y boca, son muchas horas, para hacer dos es un día”.
Aunque se trata de un referente de la cultura mexicana, lamentó que en la ciudad no las valoran, “hay mucha discriminación y por eso dejamos un tiempo de hacerlas, no nos dejaban venderlas, nos quitan y antes hasta nos correteaban”. A pesar de eso consideró que los nuevos diseños y los pedidos la motivan a seguir y crearlas con detalles únicos.
- “También nos motivó la muñeca lele gigante que se fue al extranjero, eso hizo que nos voltearan a ver y que nos preguntáramos por qué perder la tradición, entonces empecé a hacer más y ahora piden de muchas cosas, de lo que sale de moda como Frida”.
Pero sin importar la demanda de los compradores, resaltó, prefiere no modificar el patrón original ya que su labor no es hacer manualidades sino artesanías.
“Unas vez me pidieron 20 soldados con diferente ropa, después cinco payasitas, cinco barrenderos, mariachis, sí lo puede uno hacer, pero es que ya no es artesanal, es manualidad y no es a lo que me dedico”.
Señaló que le gusta su trabajo, por ello lo hace con cariño para agregarle los detalles que hacen única a cada una. “Es mi cultura otomí y no la quiero perder”.
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Para conocer más de su trabajo o contactarla se pueden comunicar al teléfono: 7222032670.
KVS