El monstruo de mi casa

El monstruo de mi casa es una de las obras iniciales de la prometedora carrera del joven dramaturgo oaxaqueño Ismael Rojas

El monstruo de mi casa
Jaime Chabaud Magnus
Ciudad de México /

El monstruo de mi casa es una de las obras iniciales de la prometedora carrera del joven dramaturgo oaxaqueño Ismael Rojas, quien osadamente también dirige y actúa en el Teatro Sergio Magaña, del generoso Sistema de Teatros de la Secretaría de Cultura de Ciudad de México. Este fin de semana serán las últimas dos funciones de esta obra a la que los padres no deberían dudar en llevar a sus niñas y niños porque tendrán una estupenda experiencia, y quizá se den cuenta de que la falta de comunicación con los que más quieren puede convertirse en un monstruo aterrador. 

La compañía Vagoncito Teatro hace prácticamente su debut en la capital con esta puesta en escena plagada de imaginación y de economía de recursos, en los que un objeto cobra otras dimensiones o función utilitaria para lograr atmósferas estupendas. La escenografía e iluminación que consiguen estos efectos eficaces es de Felisa Bobby Watson Vargas. El vestuario, que de igual forma aporta transformándose en distintos personajes, es de Mariana Serna Tenarán y la producción corre a cargo de Ileana Vargas Domínguez. La música de Saúl Pascual Pascual interactúa con las necesidades de la escena y al tener al músico a vista del público se establece un juego precioso, que ayuda como recurso para mantener al espectador dentro del espectáculo.

El monstruo de mi casa es un texto que metaforiza la violencia intrafamiliar, el desapego, el constante correr de los adultos para solucionar lo “importante” de la vida, a través de un Monstruo aterrador que se va haciendo, palmo a palmo, con el control de la casa y de la recámara de Artú, el protagonista. Este, junto con su amigo Koke, que es igual de miedoso y padece al mismo Monstruo, han de pedir ayuda al niño que hace bullying escolar. Con este inopinado aliado, que también está lleno de miedos, han de resolver el problema y expulsarán al Monstruo definitivamente de sus hogares. Es decir, cuando la comunicación padres-hijos se reestablece, los miedos desaparecen. Recomendadísima para este sábado y domingo a las 13:00 horas en el Teatro Sergio Magaña.


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