Eugenia León no asistirá físicamente a la marcha de hoy porque se recupera de la reconstrucción del tendón en un hombro; sin embargo, es muy probable que su voz se escuche en ese trayecto que recorrerán las féminas del Monumento a la Revolución al Zócalo, a partir de las dos de la tarde, para manifestar su repudio ante la violencia e inequidad de género.
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Sin embargo, la cantante no descarta que el tema “Vivan las mujeres” de Liliana Felipe, Jesusa Rodríguez y Regina Orozco, que decidió sumar a su más reciente producción, pueda escucharse en esa manifestación que desde ya es histórica, y con la que desea que se siga avanzando en ese derecho a tener las mismas oportunidades que los hombres.
Dices que estás en recuperación, ¿qué te pasó, cómo estás?
Todo bien, nada de gravedad, es una reconstrucción de tendón porque se me rompió en el hombro, me han puesto injertos y tengo que estar sujeta al cabestrillo dos meses, pero llega un momento en que te quieres jalar los pelos, (risas) pero estoy bien, son cosas que suceden y las afronta uno lo más tranquila posible.
Sin embargo, aunque estarás en reposo, seguirás escuchándote a través de tu nuevo disco, incluso ahora más, porque tienes un tema muy alusivo al movimiento femenino que estamos viviendo ¿no?
Sí, porque entre estas doce canciones que tengo, hay una pieza que se llama “Vivan las mujeres” y toca un tema que a todas nos importa, la compusieron Liliana Felipe, Jesusa Rodríguez y Regina Orozco y surgió cuando estaban en algunos cursos de comunidades de mujeres campesinas, sobre empoderamiento, pero lo que dice es universal, porque nos sentimos identificadas con cierto tipo de exigencias que ya deben ser tomadas por la sociedad, por el el estado, por el gobierno.
¿Cómo llega a tu nuevo disco?
Conocí el tema hace años y el año pasado canté en septiembre en el Palacio de Bellas Artes, y ahí la estrené yo, porque ya la habían cantado sus autoras, pero yo la pensé para el disco y la canté ahí. Y pues ahora se viene esta gran marcha en toda la República, el paro del día lunes, y creo que todas estamos sensibles frente a una situación que lleva demasiados años, no solamente en México, sino en todo el planeta, en donde mientras más conciencia y más empoderamiento, más violencia; entonces, creo que el que nos cuidemos, que haya esta sororidad entre todas es muy importante.
Aunque alguien decía que feminismo hay varios, y yo también lo creo así, pero este momento es único para todas nosotras aquí en México, en que independientemente de nuestra realidad socioeconómica o cultural, podamos tomar conciencias en esta impronta de cuidarnos a nosotras, entre nosotras ante algo que nos ha horrorizado y que nos ha hecho tanto daño, como es el sistema patriarcal machista y misógino.
Porque además, todas hemos sido víctimas de ese sistema.
Por supuesto todas tenemos heridas, y tener que levantarnos a veces sobre nuestra falta de autoestima, porque tienes un objetivo que cumplir y con todas las heridas lo haces, te levantas y sigues adelante,
Obvio, no irás a la marcha.
No, pero estoy con mi alma, con el corazón, con todas las mujeres con la marcha, con el paro, tenemos que unirnos todas porque o nos hacen caso o nos hacen caso, esto ya no puede continuar; además también es una ayuda en muchas mujeres que no se atreven, que están sujetas por el miedo, por el maltrato, que aún no han despertado. Así que hay que darles ese empujoncito para que se armen de valor y ya no acepten ni la humillación, ni la marginación, ni mucho menos los feminicidios, ni los maltratos.
Aunque es difícil en esta sociedad machista, misógina, por eso la pregunta es ¿cómo hacer para que realmente cambie?. Antes se creía que esta opresión en la que hemos vivido era lo normal, yo recuerdo escuchar a mi abuela cuando llegaba alguna tía a quejarse de su marido, les decía: ‘Ustedes aguanten porque una mujer sin marido no vale nada´, y eso es horrible, pero más que pensemos que eso es normal, somos de generaciones, mi generación ha sido del rompimiento, pero con un trabajo muy largo, incluso de psicoanálisis, y de terapias varias, para entender y recuperar nuestro autoestima
Porque reconocemos a mujeres que brillan en el mundo público, ya sea cual sea la profesión y dentro de casa siguen padeciendo el maltrato, las envidias, el sistema patriarcal machista y misógino, la mezquindad, la violencia de los maridos o de las parejas.
Creo que una de las cosas importantes, además de la educación emocional, es el tema de luchar por ser autosuficientes económicamente. Porque mientras una mujer diga: ‘Me case con este señor bien rico y aunque me trate mal, soy su florero’, eso es vivir en una cárcel de oro, creo que lo mejor es la libertad, y vivir con tus propios medios, porque la libertad no tiene precio.