Sitios fabulosos, playas con aguas templadas, monumentos históricos, vestigios arqueológicos, pinturas rupestres, ciudades coloniales y culturas ancestrales que comparten sus saberes, se encuentran en el libro Sintiendo México, de José Escalante de la Hidalga.
El ejemplar se divide por capítulos, inicia en Tenochtitlan, siguiendo cada cultura originaria, recorre además los estados y concluye con el apartado de la Ciudad de México, con la intención de ofrecer una historia sintetizada de México.
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De acuerdo con el autor, es un libro obligado para disfrutar y conocer todas las riquezas que hacen grande a México: “esta es ya la cuarta edición enriquecida y llevamos los primeros 10 mil ejemplares. Poco a poco cada publicación se fue enriqueciendo con nuevas vivencias, debido a que México no se acaba nunca: su historia, cultura, tradiciones, belleza natural, arqueológica y arquitectónica”.
En entrevista con MILENIO, Escalante de la Hidalga asegura que siempre será poco lo que se publique comparado con la riqueza de este país.
“México es una nación muy rica en tradiciones y culturas originarias, tenemos muchos idiomas. Todo nuestro territorio es tan rico que 70 por ciento de la biodiversidad animal y vegetal se encuentran en cuatro países y México es el cuarto más biodiverso. Tenemos sitios de interés como los patrimonios mixtos: la Antigua Ciudad Maya y bosques protegidos de Calakmul, en Campeche, y el Valle de Tehuacán-Cuicatlán, hábitat originario de Mesoamérica”.
Afirma que la edición actual se ha enriquecido en gran medida, y será muy agradable tenerla y poder viajar con ella.
“Es una guía, con la diferencia de que la Guía Michelin, de restaurantes y hoteles más famosos del mundo, de la empresa francesa de neumáticos del mismo nombre, tiene escritos miles de nombres y fechas, pero se hace un poquito aburrido de leer. En cambio, mi libro Sintiendo México, se lee como un cuento. Yo les comparto lo que sentí al visitar cada sitio, y les relato las razones por las cuales determinado lugar fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Refiere que también cuenta cuál fue su experiencia al caminarlo, subirse, por ejemplo, a la Pirámide del Sol y estar en esa inmensa explanada de Teotihuacán. La manera en que se imaginó cómo vivieron los teotihuacanos, y cómo los aztecas iban a ese lugar al que bautizaron “el lugar donde los hombres se convierten en dioses”.
—¿Cuántos viajes realizados están contenidos en este libro?
Híjole, empecé a conocer la República mexicana de niño. La primera vez me llevó mi padre, después a los 15 o 16 años empecé a viajar de aventón, como a los 20 años ya había conocido más de 22 estados de la República y a los 27 años ya conocía todos las entidades. He seguido viajando; trabajo normalmente en la venta de insecticidas y herbicidas y fungicidas y eso me ayudó a recorrer el país.
Sigo viajando y visitando los sitios considerados por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad. Hace años, con mi esposa, viajamos a cada uno de estos sitios.
El libro Sintiendo México tiene todo lo bueno que tenemos, eso que nos distingue como país y como mexicanos, y ni modo, tenemos que aceptar que también hay cosas malas que se deben resolver para que nuestro país viva con seguridad y pueda ser visitado como lo que es, una potencia cultural.
—¿Por qué un libro de esta naturaleza?
Como a los 25 años de edad empecé a viajar por el mundo, conozco 70 países y este es el libro que me hubiera gustado leer ante de visitar cada uno de esos lugares.
Sintiendo México tiene todos los sitios de interés de cada estado de la República y los combino con la historia sintetizada de México. De esta forma quien lee el libro entenderá lo que es nuestro país tan diverso, como una cultura tan interesante que vale la pena conocerlo y recorrerlo. Yo sigo disfrutando y aprendiendo de todo lo que somos los mexicanos.
—¿Cómo hacer de un viaje a una aventura?
Disfrutando el viaje, el paisaje, cada monumento, las reliquias, cada inmueble arquitectónico, cada vestigios arqueológico como Mitla, que cuando llegaron los españoles estaba en su apogeo y es una tristeza que se haya perdido parte de ella, pero es una fortuna que nos queden tantas paredes y pirámides que muestran su riqueza arquitectónica, con sus altos y bajos relieves.
Lo que importa es observar, leer, informarse de los lugares que se quieren visitar. Esto es lo que el libro quiere estimular, es una introducción a México, es un viaje a vuelo de pájaro, de decir por qué somos así, nuestra belleza y cómo puedes hacer el primer viajar desde tu sofá, leyendo este libro y después puedes hacer planes para viajar.
Las fotos inspiran. La primera vez que vi de niño la Pirámide de Los Nichos, ubicada en la Zona Arqueológica del Tajín, en Veracruz, me propuse conocerla algún día. Hablamos de un México universal que todo mundo quiere conocer y que debemos sentirnos orgullosos y mostrarlo hacia afuera.
PCL