Un gallo sobre un lobo o al revés:
un lobo o una loba sobre un gallo
apretándose en el calor de mayo
porque el sol de este mes subió los pies
en la velocidad
de mi caballo,
caballito de mar
igual que un pez;
pasa volando sin número,
pues aquí todo sucede como un rayo
sobre mi caballo
y nada puede deshacer la cita
que nosotros hicimos
en los ojos cuando levanto el dedo
y muy gallo
y muy lobo
y no clásico
te digo: “pajarita
abre el blanco ‘mármol
de tus hinojos’ ”
que hoy he visto
en un cuadro
de Francisco Toledo.
ÁSS