Nacido en São Paulo y radicado en México desde hace cuatro décadas, el pianista, compositor y docente Joao Henrique ha grabado los álbumes Jazz latino, Mercado de flores, Brasiliando y dos entregas de Joao plays Jobim. En la estación de radio Horizonte conduce el programa “Canta Brasil” y ha sido director musical de Betsy Pecanins, Margie Bermejo, Denisse de Kalafe, Guadalupe Pineda y Mijares. Hoy juega ping-pong con Laberinto.
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—¿Qué es la música?
Mi vida.
—¿Qué es el piano?
Mi amante.
—¿Qué aprendiste en el conservatorio?
Sobre todo, armonía e improvisación.
—¿Y al lado de Lucho Gatica?
Con él conocí las entrañas del bolero.
—Tom Jobim en una frase.
Mi papá musical.
—Compositor favorito de música clásica.
Chopin.
—Una pieza de Heitor Villa-Lobos.
Bachiana brasileira No. 5.
—Oscar Peterson o Thelonious Monk.
Oscar Peterson.
—Otro instrumento que quisieras dominar.
El sitar, que lo tocaba Ravi Shankar.
—Un músico mexicano.
Eugenio Toussaint.
—Dos standards.
“The Nearness of You” y “I Left My Heart in San Francisco”.
—Dos canciones de Manzanero.
“Contigo aprendí” y “Somos novios”.
—Dos libros en una isla desierta.
Pedro Páramo y Gabriela, clavo y canela.
—Un personaje histórico de Brasil.
Pedro II.
—¿Quién era tu ídolo a los 15 años?
Los Beatles.
—Un consejo para músicos jóvenes.
Estudiar, practicar y tocar en público.
—¿Cuál es la magia de la radio?
Que los sonidos viajen lejos y lleguen al oído de quien necesitaba escucharte.
—Una experiencia de “Canta Brasil”.
El Estudio A del IMER repleto cuando celebramos el primer aniversario.
—¿Cuántos estados de México conoces?
He trabajado en todas las capitales.
—Lo mejor y lo peor de los mexicanos.
Lo mejor, la calidez de su gente; lo peor, muchos políticos, como en Brasil.
—Un platillo mexicano.
Enchiladas de mole.
—Del 1 al 10, cuánto picante resistes.
Llegué como al 7, pero ya no.
—El reguetón en una frase.
Género de sólo dos acordes.
—El día más feliz de tu vida.
Casi todos. Profesionalmente, cuando grabé con grupo y orquesta mi composición “La bailarina”, para el cierre de La movida de Verónica Castro, y no hubo ningún error.
—Música para tu último día.
Que sea de Rajmáninov.
—Tu epitafio.
“Amó la vida y la música”.
AQ