I
Los milagros existen. Prueba de ello es ver y escuchar a la Orquesta Sinfónica y Coro Juvenil de Tultepec en la Catedral Metropolitana con temas de Bach, Vivaldi y Corelli: medio centenar de músicos que radican en ese municipio del Estado de México y no cobran un sueldo.
Cuando ejecutan “Gloria in excelsis Deo” (Gloria, RV 589), de Vivaldi, me viene a la mente que a Tultepec se le llama “la capital de la pirotecnia”.
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El concierto barroco para celebrar la Navidad se completa con la participación de Adrián Rojero, quien aporta improvisaciones en un par de interludios en el órgano del templo. Una fecha inolvidable (21 de diciembre de 2023) tanto para los artistas que se plantaron en el altar mayor como para el público que los escuchó en un sitio tan especial.
El director de la Orquesta Sinfónica Juvenil de Tultepec (OSJT) también es un destacado organista, Víctor Contreras, a quien le pregunto qué le quiere pedir a los Reyes Magos. Sin dudar, responde: “presupuesto estatal”.
La OSJT tiene su sede en el Edificio Bicentenario, anexo a la presidencia municipal de Tultepec. El gobierno del Estado de México no tiene asignado un fondo para la orquesta, aunque el ayuntamiento local la apoya en la compra de ciertos instrumentos y atriles.
Cuando los músicos se presentan fuera de Tultepec, reciben ayuda para el transporte por parte de una sociedad de amigos, pero se requiere de un apoyo más formal.
La base de la orquesta son 23 cuerdas y crece hasta 43 integrantes cuando ofrecen conciertos sinfónicos, más el coro si el programa lo requiere, como fue el caso en la Catedral Metropolitana y en el Museo Nacional del Virreinato, en Tepotzotlán (3 de diciembre de 2023).
II
La primera vez que escuché a los jóvenes músicos de Tultepec fue el 25 de octubre de 2023, en el Museo Soumaya, espectacularmente enmarcados por las reproducciones en tamaño real del David de Miguel Ángel y La puerta del infierno de Rodin, que están en el lobby del recinto.
Esa noche, a varios muchachos de la orquesta los vi llegar con casco de motociclista y minutos después interpretar el Huapango de Pablo Moncayo y canciones populares mexicanas. Una joven violinista estaba tan emocionada que no vio una banca que se cruzó en su camino y casi dio una voltereta antes de caer al piso. Como si fuera de goma, se levantó con gran agilidad y ocupó su lugar como si no hubiera pasado nada.
III
Le pregunto a Víctor Contreras cómo ha sido la experiencia de ver a sus pupilos tocar en lugares tan emblemáticos. Responde: “Algo maravilloso. Sentí en ellos gran seguridad, todos ensayan mucho no solo cuando nos reunimos sino también en sus casas. Yo todavía no sé quiénes se van a dedicar por completo a la música, pero vi caras realizadas. Estas experiencias son parte de su formación y les van a servir en cualquier profesión que elijan. En Tepotzotlán hubo pasajes muy complejos en la música de Bach y salieron adelante como si tuvieran mucha mayor experiencia. Fue muy emocionante”.
Acerca de las diferencias acústicas en los tres recintos mencionados, señala que el templo de San Francisco Javier, en Tepotzotlán, es el mejor en ese sentido: “parece una sala de conciertos”. Añade que tanto en la Catedral Metropolitana como en el Museo Soumaya es difícil que todos los músicos se escuchen entre ellos, pero ese tipo de dificultades se prevén durante los ensayos.
Contreras recuerda que en 2022 Gilberto Arzola, violinista, fundador y director general de la OSJT, lo invitó a dirigir un concierto. Hubo tan buena química en esa ocasión que se quedó como director artístico. La coordinadora operativa es la violinista Fernanda Barros y el coro lo dirige Luis Alberto Cortés. La mayoría de los jóvenes estudia en el Colegio de Música de Tultepec, que es una institución privada, y en algunos conciertos tienen como invitados a instrumentistas más experimentados del Conservatorio Nacional.
IV
Víctor Contreras nació en Tultepec. Inició sus estudios musicales en Toluca y se especializó en órgano y clavecín en el Conservatorio de Saint-Maur-des-Fossés, en Francia. Ha ofrecido conciertos en México y en varias ciudades de Europa, además de dar clases en el Conservatorio Nacional de México y en la Escuela Superior de Música. Fundó varios festivales de órgano en nuestro país y estudió dirección de orquesta con Sergio Cárdenas y Fernando Lozano.
Con el apoyo del antiguo Fonca grabó Epístolas sonoras, que contiene tres discos con música barroca mexicana. Su álbum más reciente es Cuaderno de tonos de maitines. Sor María Clara del Santísimo Sacramento, con piezas religiosas compuestas por esa monja oaxaqueña del siglo dieciocho.
Contreras tiene apenas 43 años y la misma pila alcalina de los muchachos a quienes infunde amor y respeto por la música. Si los Reyes Magos le traen lo que pidió, la Orquesta Sinfónica Juvenil de Tultepec alcanzará muy pronto nuevas e importantes metas; de lo contrario, también lo hará aunque se tarde un poco más.
AQ