Queridos lectores: esta será mi última columna, por lo que le agradezco a José Luis Martínez S. el espacio. He querido dejar aquí el testimonio de algunas mujeres que, por diversas razones fueron agraviadas o invisibilizadas a lo largo de la Historia, desafortunadamente la lista es larga y me faltó nombrar a tantas. Escritoras, artistas, científicas.
Me hubiera encantado hablar de las mujeres beatniks, quienes, a diferencia de sus compañeros varones, como Jack Kerouac, Allen Ginsberg, Lawrence Ferlingetti o Gregory Corso no fueron tan conocidas: Diane di Prima, Marge Piercy y Elise Cowen, entre otras. El mismo Corso declaró una vez: “Hubo mujeres, estaban allí, yo las conocí, pero sus familias las encerraban en manicomios, se les sometía a un tratamiento de electrochoque. En los años 50 si eras hombre podías ser un rebelde, pero si eras mujer tu familia te encerraba”. Estas poetas fueron las primeras en escribir lo que significaba ser mujer en un sistema patriarcal.
Me faltaron Anne Sexton, Clarice Lispector, Alejandra Pizarnik, Elizabeth Bishop, Elizabet Barret Browning, Maya Angelou y Silvina Ocampo, entre otras, quienes a través de su escritura gritaron su diversidad de perspectiva y de ser. En la lista de las mexicanas: Amparo Dávila, Inés Arredondo, Concha Urquiza, Laura Méndez de Cuenca, entre muchas otras.
Ada Lovelace, hija del poeta George Gordon Byron, fue abandonada al mes de nacida por su padre y educada por su madre Anna Isabella Noel Byron que era matemática y astrónoma y se aseguró de que su hija aprendiera matemáticas y ciencias. A los dieciocho años conoció a Charles Babbagge con quien comenzó a trabajar en su máquina analítica. Ada fue la primera en concebir el concepto de computadora. Ada escribió unas Notas, en donde distinguía con claridad entre datos y procesamiento; este pensamiento era revolucionario para su tiempo. Ada aspiraba a crear la informática, que llamaba la ciencia de las operaciones. Lo que a ella le interesaba de la máquina analítica eran sus funciones prácticas, a diferencia de Babbagge. Se considera que descubrió el primer algoritmo y por lo tanto se le considera la primera programadora de la historia, aunque durante mucho tiempo se le negó la hazaña, atribuyéndosela a Babbagge, pues se consideraba imposible que una mujer tuviera tal logro.
Entre otras científicas mencionaremos a Carolina Herschel, hermana del astrónomo William Herschel, descubridor del planeta Urano. Carolina trabajó estrechamente con su hermano, haciendo observaciones, anotaciones y construyendo telescopios. Descubrió ocho cometas, de los que seis llevan su nombre.
Y por último no podemos dejar de nombrar a Hedy Lamarr, actriz de Hollywood, a la que se le atribuye más que su belleza física: inventó la primera versión del espectro ensanchado que permitiría las comunicaciones inalámbricas de largas distancias, en pocas palabras, el antecedente del wifi y el bluetooth.
Feliz Navidad a todos.
AQ / MCB