Después de una larga ausencia, el artista Sergio Hernández (Huajuapan de León, Oaxaca, 1957) regresa a exponer su obra en Estados Unidos, en la Durban Segnini Gallery, en Miami, Florida, a partir de hoy.
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Tuvieron que pasar más de tres décadas para que el artista plástico, uno de los más valorados en Latinoamérica, se animara a volver a ese país, con su exposición Parábolas.
Incluso, de forma paralela, la Durban Segnini Gallery presentará una de las obras de Sergio Hernández, Nuevo mundo, en la feria Art Basel Miami, del 4 al 8 de diciembre.
En entrevista con M2, Sergio Hernández dice que debió haber expuesto en Estados Unidos desde antes. “Lo hice hace 35 años, en Nueva York, en la galería de Artistas Asociados Americanos, en la Calle 57. La dueña, con quien solo teníamos el compromiso de tomar un té, compraba toda la obra. La conocí por Francisco Toledo, pero la señora falleció y ya no tuve galería. Me quedé únicamente con casas de subastas como Sotheby’s y Christie’s, que mueven y venden mis obras”.
Relata que olvidó el tema del mundo de las galerías, porque tampoco insistió en buscar a otra galerista que promoviera su trabajo, simplemente porque en aquella época estaba más preocupado por pintar.
Recuerda que su otro contacto en Nueva York fue con la galería King, cuya propietaria era una mujer coreana, quien lo invitó a inaugurar una muestra con su obra.
“Cuando vi, tenía muchas de mis piezas. Lo que sucedió es que yo había trabajado cuatro años en Atzompa, en uno de los municipios de Oaxaca; ahí realicé unas 30 cerámicas muy grandes y se las dejé a unas señoras para el agua. La coreana se las compró todas y se las llevó a su galería en Nueva York; obviamente nada más necesitaba de mi presencia el día de la inauguración”.
Refiere que la galerista pagó por esas cerámicas entre 200 o 300 pesos, la más cara en mil, y esa colección luego la revendió en Francia.
NUEVOS COLECCIONISTAS
Sergio Hernández expondrá en Miami su obra más reciente, conformada por paisajes y algunas obras en color rojo que nunca había mostrado: 14 óleos y arenas sobre lino, cuatro obras mixtas sobre plomo y una escultura en bronce.
Confiesa que es el momento para salir de México y explorar en el extranjero para tener una relación más amplia, ya no tan local.
“Regreso con el interés de difundir y vender mi obra en Estados Unidos, y la intención de encontrar nuevos coleccionistas en el ámbito internacional. No sé si sea demasiado tarde, pero haré el intento”.
La muestra, precisa el creador cuya obra forma parte de la Colección MILENIO Arte, refleja su preocupación por la deforestación de las selvas, por la trágica pérdida de estas zonas, tanto de México como de Brasil.
“Son cuadros de gran formato que representan una selva fantástica basada en la obra de Julio Verne: son estas zonas míticas de la Atlántida, paisajes imaginarios. Represento a la vida y a la naturaleza de los insectos que platican dentro de un mundo nocturno. Para ello recurro a los verdes muy especiales, estoy trabajando sobre colores temáticos en composición con las formas del dibujo”.
El crítico de arte Edward J. Sullivan indica en el catálogo de la muestra Parábolas que “esta exposición constituye un momento clave para el artista Sergio Hernández, ya que sus cuadros de gran formato no se exponen en Estados Unidos desde hace tiempo. Esta nueva selección de la galería Durban Segnini incorpora muchos temas que han interesado a Hernández a través de los años, incluyendo extraordinarios experimentos en forma semiabstracta”.
La obra de Sergio Hernández se podrá observar hasta el 15 de marzo de 2020 en la Durban Segnini Gallery.
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MÁS PREGUNTAS QUE RESPUESTAS
Sergio Hernández dice que la 4T lo deja “patidifuso, yo tengo más preguntas que respuestas. Me cuesta digerir la información que recibo. En lo que lleva la Secretaría de Cultura, no he visto nada, no se refleja el apoyo a la cultura. El impulso que la cultura tenía con el maestro Toledo se ha ido frenando y apenas han pasado tres meses de su fallecimiento”.