En las inmediaciones de Ciudad Universitaria se abre un espacio novedoso que complementa el corredor cultural de la UNAM, se trata del nuevo Pabellón Nacional de la Biodiversidad del Instituto de Biología y cuya construcción corrió a cargo de la Fundación Slim.
Albergará más de 130 mil especímenes disecados de cuatro colecciones biológicas, entre los que destacan insectos, mamíferos, anfibios, reptiles, microorganismos, hasta el esqueleto de un cachalote y una ballena azul, en su mayoría acervo de la biodiversidad mexicana, pero también de otros partes del mundo.
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“Es el trabajo de investigadores de muchos años, tanto de los que están actualmente laborando en el instituto, como los que nos antecedieron en esta actividad, son ejemplares que han recolectado”, señaló el doctor Pedro Mercado, secretario técnico del Instituto de Biología.
Añadió que es importante que “los más pequeños puedan apreciar la gran cantidad de especies que tenemos y que nos están rodeando de manera cotidiana; y que muchos de estos chicos en especial de Ciudad de México, ya no pueden apreciar algunas especies” debido al crecimiento de la urbanización de la capital o a la extinción de algunos especímenes.
El inmueble, de 12 mil metros cuadrados y tres niveles, combina la museografía junto al conocimiento científico y su divulgación, pues durante los recorridos, los visitantes podrán observar y conocer el trabajo del personal académico de la máxima casa de estudios.
El objetivo del pabellón es concientizar a las personas sobre la importancia de conservar nuestro medio ambiente y proteger la biodiversidad. “Si la gente no conoce la biodiversidad no la va cuidar, entonces no podemos cuidar lo que no conocemos; la intención es que hay que conocer la biodiversidad, apreciarla y conservarla porque finalmente es nuestro beneficio” expresó Pedro Mercado.
Contará con seis salas de exhibición permanente y una de exposiciones temporales, así como una bibilioteca digital y laboratorios. Además, posee tecnología de punta que permite tener actividades interactivas para profundizar la información de los especímenes y su hábitat, como un área inmersiva de cuatro ecosistemas o biomas: una cueva, un desierto y dos tipos de selva, así como microscopios, pantallas touch, hasta explicaciones del mismismo Charles Darwin.
El Pabellón Nacional de la Biodiversidad aún no se encuentra abierto al público debido a las restricciones sanitarias por la pandemia de covid-19, sin embargo, la UNAM se encuentra trabajando en todos los protocolos para que puedan visitarlo muy pronto con toda seguridad.
PCL