La final masculina de 100 metros eclipsada en unos Juegos: Yulimar Rojas pulverizó el récord mundial del triple salto, que llevaba en pie desde 1995, para llegar a 15.67 metros y colgarse su primer oro olímpico, este domingo en Tokio, donde el italiano Lamont Marcell Jacobs ganó por sorpresa en la línea recta.
Todo estaba preparado para que Tokio 2020 coronara este domingo en la prueba reina de la velocidad al sucesor del mítico Usain Bolt, el hombre que había dominado los 100 metros en las tres anteriores ediciones olímpicas.
Pero instantes antes de esa final, el atletismo vivía un momento histórico, con el sexto y último salto de la venezolana Yulimar Rojas, que tenía ya asegurado el oro con el 15.41 metros que había logrado en el inicio del concurso.
Lograr esa marca tan buena desde el principio, a dos centímetros de la mejor marca personal con la que llegó a Japón, le garantizaba la medalla de oro porque ninguna competidora parecía capaz ni de acercarse.
Yulimar compitió entonces contra Yulimar. Únicamente buscando la ansiada plusmarca mundial, que llevaba persiguiendo en los últimos años.
En ese último intento, a todo o nada, Yulimar voló. Sabía que había llegado lejos, vio la bandera blanca de que el salto era válido y se confirmó la hazaña: 15.67 metros, nuevo récord mundial.
"No tengo palabras, no puedo describir lo que siento en estos momentos. Una medalla de oro olímpica, con un récord olímpico, con un récord del mundo... Es una noche fantástica", comentó la gran protagonista del día.
"Sabía que tenía esa distancia en mis piernas, que podía conseguirlo hoy. Estaba fallando algo en el aspecto técnico, pero en el último salto lo di todo para conseguirlo", explicó.
ZZM